La exposición Dispositivos visuales: restructurar lo posible, que reúne los trabajos de Ariatna Sánchez, Gabriela Reyes, Citlali Hernández y Laura Luna+Anaid Bohor, invita a cuestionar qué es la tecnología y a crear nuevas imágenes de lo posible.

Con la curaduría de Cristina Brambila, la muestra permanecerá hasta el 14 de agosto en la galería Manuel Felguérez y Foros del Centro Multimedia del Centro Nacional de las Artes (Cenart).

En entrevista, Brambila explica que la muestra “busca que reflexionemos sobre lo que asumimos y consumimos como tecnología, y qué podemos hacer a partir de esa postura. Partimos mucho de la idea de que todos podemos ser productores de tecnología”.

El proyecto se inició hace un año con la pregunta: ¿es posible cambiar al mundo? La curadora considera que la creciente presencia de tecnologías en distintos aspectos la vida continúa transformando la concepción que tenemos sobre la realidad.

“Los límites entre conceptos que se consideraban antagónicos, paulatinamente se vuelven difusos. Las fronteras entre público y privado, físico y virtual, cuerpo y máquina han sido reconfiguradas.

“Nos interesa mucho rescatar la diversidad tecnológica, reconocerla justo a partir de programación en español que no parta desde el inglés, porque esto condiciona los programas.

“Creemos que si podemos crear tecnología, ésta, a su vez, también puede modificar a la sociedad y así podemos producir o apuntalar a un mundo distinto, de ahí el título de lo posible”, comenta Cristina Brambila.

La muestra está conformada por instalaciones interactivas, espacios inmersivos manejados con inteligencia artificial y performances híbridos que permiten reconocer la diversidad tecnológica contrahegemónica que atraviesa el cuerpo, los espacios habitados y el tiempo en un mundo donde la presencia de la tecnología en la cotidianidad ha traspasado los límites entre cuerpo y dispositivo.

Encuentro entre técnica y arte

Brambila explica: “La visión de la muestra es qué pueden decir las artes de la tecnología. El trabajo de las artistas se vincula con la tecnología, busca ampliar el concepto de tecnología y entender que la escritura misma puede ser una”.

La muestra incluye la obra Rutinas: Prototipos de acción, de Ariatna Sánchez, una escultura interactiva creada a partir de la investigación que la artista realizó con oficinistas poniendo atención en sus historias personales.

Desplazamientos, de Citlali Hernández, explora cómo se construyen hábitos corporales en entornos sociodigitales; es un sistema híbrido ubicado en dos espacios geográficos, la Ciudad de México y Barcelona, vinculados por una página web y el cuerpo de la artista, con la que es posible interactuar mediante mensajes en un chat y likes que se transforman en vibraciones en circuitos electrónicos sobre la piel.

Gabriela Reyes, conocida como Cero Tres, participa en la muestra con la pieza Arca de acción, instalación lumínica “para detener el tiempo y contemplarlo”. Mientras en La casa de la 11: ficciones y extrusiones, de Laura Luna y Anaid Bohor, el público conocerá un espacio inmersivo cuyo fin es traer la materialidad a una casa que ya no existe. Se recrea a partir de las memorias e historias de personas que la habitaron.

Anaid, en forma de avatar, narra la historia de la casa rompiendo las fronteras entre la ficción, la memoria y la imaginación.

Como parte de esta exposición se diseñó el sitio web http://cmm.cenart.gob.mx/Dispositivos_Visuales, donde se puede consultar más información sobre los procesos de investigación y producción que realizaron las artistas para la creación de sus piezas.

Dispositivos visuales: restructurar lo posible hasta el 14 de agosto en la galería Manuel Felguérez y Foros del Centro Multimedia del Cenart (Río Churubusco y calzada de Tlalpan, colonia Country Club).