Filadelfia. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reveló ayer un plan de Occidente para construir silos en las fronteras de Ucrania, incluso en Polonia, con el fin de facilitar la exportación de trigo ante el bloqueo ruso de los puertos del Mar Negro y advirtió que el plan de ayuda que tiene por objetivo llevar más trigo ucranio a los mercados mundiales estaba “tomando tiempo”.
La invasión rusa a Ucrania, lanzada el 24 de febrero, tuvo un impacto global con presiones inflacionarias que agravan la crisis alimentaria debido al alza de los precios de cereales y fertilizantes.
“Estoy trabajando en estrecha colaboración con nuestros socios europeos para sacar al mercado 20 millones de toneladas de granos bloqueados en Ucrania y así ayudar a reducir los precios de los alimentos”, declaró ante una convención sindical en Filadelfia.
El mandatario indicó que la alternativa de la exportación terrestre se complica porque los ferrocarriles ucranios usan un ancho de vía diferente al de los países vecinos.
Por otra parte, el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, declaró que Kiev necesita “más armas pesadas”.
En tanto, el papa Francisco advirtió de que en el mundo “se ha declarado la tercera guerra mundial” y pidió no reducir la complejidad de la guerra en Ucrania al patrón de “buenos y malos”.
El ex presidente estadunidense Barack Obama dijo que la ofensiva rusa es “una llamada de atención” para la estabilidad europea y consideró a Putin “una amenaza para la democracia europea”.