La persistente inflación por encima del rango objetivo del Banco de México ha llevado a que uno de cada seis inversionistas nacionales e internacionales calcule una tasa de política monetaria hasta en 9.5 por ciento al cierre de este año –actualmente es de 7 por ciento–, un nivel sin precedente en los registros del organismo central.

De acuerdo con el sondeo realizado por LatinFocus entre más de 30 grupos de análisis, la tendencia apunta a que la inflación cerrará este año en 6.7 por ciento, el doble que el objetivo del Banco de México, que es de 3 por ciento con un rango de un punto porcentual hacia arriba o abajo de esa media.

Las presiones en el costo de bienes y productos se perfilan a ser contenidas en México hasta 2024, de acuerdo con los inversionistas consultados. Aún con las tasas de interés al alza se calcula que la inflación cierre el próximo año en 4.4 por ciento.

En ese entorno de alta inflación, al que se suma un esperado incremento en la política monetaria del banco central de Estados Unidos –la Reserva Federal– este miércoles, la media de inversionistas prevé que la tasa de referencia del Banco de México cierre este año en 8.75 por ciento.

El pasado 12 de mayo, el banco central mexicano, en lo que fue una octava alza consecutiva, aumentó en medio punto su tasa de referencia, la cual pasó a 7 por ciento. La mayoría del mercado consultado en el informe de LatinFocus, prevé que la tasa alcance aumento de 1.75 puntos porcentuales en lo que resta del año.

Sin embargo, los analistas de Monex, Scotiabank, Goldman Sachs, Grupo Financiero Banorte y Credit Suisse calculan que la tasa de interés cerrará este año en 9.5 por ciento; Casa de Bolsa Finamex y JP Morgan proyectan 9.25 por ciento.

La tasa objetivo marca una referencia en el costo de los créditos para familias y empresas, lo cual impacta en el consumo y la inversión. En la base de datos de Banco de México se observa que el nivel más alto ha sido 8.25 por ciento, registrado en 2008, 2009, 2018 y 2019.