Dos días después de que fue instalado el monumento a la concha en la alameda de Santa María la Ribera, que generó malestar entre vecinos y paseantes al considerar que “no es lugar para que la empresa Bimbo se haga publicidad gratis”, fue retirado.
Ayer, personal de la alcaldía Cuauhtémoc acudió al lugar y desmontó la estructura, que consistía en una base, una taza y una concha de gran tamaño, luego de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Gobierno de la Ciudad de México le solicitaron removerlo de manera inmediata.
Fuentes de la alcaldía informaron que no otorgaron ningún permiso a la empresa para la colocación de la escultura, la cual fue trasladada a una bodega donde se almacenan los insumos y mercancías que se aseguran en la vía pública.
El monumento a la concha, que fue develado por el osito Bimbo y estaría del 11 al 14 de junio, fue colocado a unos metros de distancia del kiosco morisco, lo que generó malestar entre vecinos y visitantes porque “se trata de una zona catalogada”, dijeron.
El INAH, organismo normativo por ley en el cuidado y protección de los monumentos, colindancias y zonas de monumentos históricos declaradas, informó que no otorgó ninguna autorización para su colocación.
La alameda de Santa María la Ribera y su kiosco morisco, explicó, se encuentran en el catálogo nacional de monumentos históricos inmuebles del INAH por su valor histórico y arquitectónico.
Por ello, junto con el gobierno capitalino se solicitó a la alcaldía retirarlo de manera inmediata, debido a que para realizar cualquier intervención en esta zona es indispensable presentar el proyecto y solicitar la autorización al INAH por medio de su ventanilla única, indicó.
La Secretaría de Cultura federal y el INAH reiteraron su compromiso de mantener un diálogo permanente y una relación más cercana con los distintos órdenes de gobierno para garantizar un uso responsable y respetuoso de los espacios y bienes patrimoniales de alto valor cultural e histórico, para beneficio y disfrute de la ciudadanía