Londres. Los datos disponibles sugieren que las vacunas contra el COVID-19 de ARNm no causan ausencia de menstruación, concluyó el viernes el regulador sanitario de la Unión Europea.
La evaluación fue motivada por los informes de trastornos menstruales tras recibir una o dos inyecciones de las vacunas de Moderna o Pfizer-BioNTech.
Los trastornos menstruales pueden deberse a una serie de razones, entre las que se incluyen afecciones médicas subyacentes, así como estrés y cansancio. Las autoridades sanitarias han destacado que también se han notificado casos tras la infección por covid-19.
La ausencia de menstruación se define como la falta de sangrado durante un periodo de 90 días o más.
Mientras tanto, el Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) sigue investigando los casos de sangrado menstrual abundante con las dos vacunas.
Los informes sobre menstruaciones abundantes —sangrado caracterizado por un mayor volumen y/o duración que interfiere en la calidad de vida— se destacaron como una preocupación potencial después de que un estudio realizado en Noruega sugiriera un aumento de los casos de este fenómeno tras la inoculación.
El viernes, el Comité dijo que había revisado todos los datos disponibles sobre el posible riesgo, pero que había solicitado a los fabricantes de vacunas una revisión acumulada actualizada de los caso