Colonia, Alemania. Dietmar Baruner, empleado de línea de montaje de Ford, pensó que su carrera de 30 años había terminado después de que unos problemas de salud recurrentes afectasen a la movilidad de su hombro y una muñeca. Sin embargo, ahora está poniendo toda su experiencia a una mayor cantidad de tareas gracias a su nuevo colega: un robot colaborativo al que ha apodado Robbie.
El cobot Robbie está diseñado para colaborar con personas con movilidad reducida o discapacidades, asumiendo tareas que, de otro modo, les resultarían difíciles o imposibles. Tras el éxito del periodo de prueba de 18 meses, Ford ha decidido quedarse con Robbie de forma permanente, lo que podría llevar a la instalación de más cobots en las plantas de producción de la firma del óvalo azul para ampliar las oportunidades de trabajo a una gama más diversa de personas. (Ver video aquí)
“Con el paso de los años, se me hacía más difícil hacer mi trabajo. Entonces, llegó este pequeño robot para tener un brazo extra, un brazo muy fuerte”, dijo Dietmar. “Lo ha cambiado todo. Espero que abra la puerta a que otros como yo tengan la oportunidad de hacer, o seguir haciendo, los trabajos que aman”.
¿Qué es un cobot, y cuáles son sus ventajas?
Los cobots o robots colaborativosse han convertido en una aplicación práctica de la industria 4.0, automatizando procesos industriales, repetitivos, manuales e incluso peligrosos para las personas. Cada vez más empresas apuestan por esta forma de automatizar procesos.
presentan muchas ventajas que diferencian qué es un robot colaborativo frente a sus precedesores, los robots industriales tradicionales. Destacan por su versatilidad (pueden realizar varias funciones e integrarse en diferentes entornos), su reducido tamaño, alta precisión, la mejora de la calidad, el aumento de la productividad y su precio al alcance de pequeñas y medianas empresas.
Los cobots pueden realizar prácticamente cualquier tarea manual, con la adecuada aplicación de robótica colaborativa y sus accesorios correspondientes. Generalmente se dedican a realizar los trabajos más repetitivos y manuales, pero también pueden encargarse de trabajos que suponen un riesgo para los operarios, como el manejo de piezas cortantes o trabajos en temperaturas hostiles.
A diferencia de los robots industriales tradicionales, los cobots están diseñados para trabajar con personas (pueden incluso interactuar con ellas) y pueden programarse previamente o en tiempo real de una forma muy sencilla, sin necesidad de una alta cualificación o formación previa. Gracias a una interfaz muy intuitiva, tras la integración del robot colaborativo cualquier operario puede enseñarle los pasos a seguir en solo unos minutos.
Además, tienen un diseño ligero y compacto, con varios ejes articulados y una gran flexibilidad, que permite su fácil integración en talleres, almacenes y laboratorios, incluso en espacios reducidos
Trabajando en equipo
Dietmar y Robbie trabajan juntos en la cadena de montaje de Ford en Colonia, Alemania, colocando cubiertas circulares en los motores. Dietmar le pide a Robbie que coloque cubiertas en los soportes y las apriete firmemente en su sitio. Esta tarea de precisión requiere alinear perfectamente los agujeros para que Dietmar pueda utilizar un destornillador eléctrico para fijar las cubiertas y el motor se mueva a lo largo de la línea.
El proyecto de investigación de Ford se diseñó para demostrar que las personas con problemas de movilidad o con alguna discapacidad pudieran ocupar puestos de trabajo en la industria manufacturera sin necesidad de dispositivos de protección o barreras de seguridad. Robbie solo se mueve cuando Dietmar lo activa y tiene sensores que detectan cuando sus manos o dedos pueden encontrarse en el camino.
“Robbie ha ayudado a demostrar la amplia cantidad de funciones que pueden desempeñar las personas con discapacidad o con movilidad reducida si se tiene cuidado en diseñar un espacio que se adapte específicamente a las necesidades del trabajador. Los robots colaborativos podrían ayudar a crear más puestos de trabajo, así como a extender las carreras de nuestros empleados actuales”, mencionó Oliver Färber, Gerente de Planta, Operaciones de Tren Motriz de Colonia, Ford Europa.
El proyecto de investigación premiado contó con el apoyo de la Universidad Técnica de Aquisgrán y de Landschaftsverband Rheinland (LVR), el mayor proveedor de servicios para personas con discapacidad de Alemania, que aportó cerca de 400 mil dólares al proyecto.
Anteriormente, Ford presentó otros cobots programados para ayudar a los trabajadores en la línea de producción en procedimientos complejos, como el pulido de vehículos.