San Cristóbal De Las Casas, Chis., Los periodistas chiapanecos Juan de Dios García Davish y María de Jesús Peters Pino, planean abandonar México debido a que han recibido amenazas de muerte y ante la falta de respuesta de las autoridades para garantizar su seguridad.
García Davish dijo que él y su esposa, residentes en la ciudad fronteriza de Tapachula, prevén tomar esa medida luego de que el 13 de mayo recibieron una llamada telefónica “muy fuerte, muy impactante, donde un supuesto miembro del crimen organizado de uno de los tantos cárteles que hay en el país, se identificó como Arturo Valencia Díaz, quien me advirtió que iba a asesinar a mi familia, a mis hijos, si no llegaba a un acuerdo económico con ellos, sino daba la cooperación”.
Añadió: “me dijo que estaba acercándose de forma civilizada, pero fue muy preciso en decirme que en caso de que yo no aceptara, iban a matar a mi familia, también me afectarían físicamente y lo están haciendo”.
García Davish dirige la agencia de noticias Quadratín Chiapas y su esposa, Peters Pino, es corresponsal del periódico El Universal en la frontera sur. Ambos han cubierto durante varios años el fenómeno migratorio, entre otros temas. El comunicador manifestó que denunciaron hace unos días los hechos ante la Fiscalía General del Estado, por lo que la agente del Ministerio Público, Elena Guadalupe Pineda Palacios, emitió medidas cautelares que “no se cumplieron”.
Agregó: “Pasaron policías nada más un día y a los dos o tres días vino ella personalmente con otros agentes estatales, nada más para que le firmara y se fueron, hasta ahorita no ha venido nadie. La Guardia Nacional se puso en contacto conmigo el sábado, me hablaron para decirme que iban a estar dando rondines, patrullajes, pero no ha pasado nadie, no ha venido nadie a mi domicilio”.
Expresó que eso “me tiene destrozado sicológicamente, estoy tronado. Sigo recibiendo llamadas, aunque ya no hay amenazas, me llaman y se quedan 10 o 15 segundos en la línea y cuelgan”.
García Davish comentó que después de unos días, la FGE le notificó que se declaraba incompetente y su caso lo llevaría la Fiscalía General de la República, pero la dependencia no ha tenido ningún acercamiento y no le han tomado su declaración.