Managua. El Congreso de Nicaragua ilegalizó ayer a otras 96 organizaciones no gubernamentales, lo que aumenta a 440 las agrupaciones disueltas por el gobierno de Daniel Ortega desde las protestas de 2018.
Diversas entidades acusaron al gobierno de reducir “el espacio de la sociedad civil”.
Entre las entidades sancionadas está el Centro de Estudios Internacionales, que dirigía la hijastra del mandatario, Zoilamérica Ortega Murillo, en el exilio y quien acusó a Ortega de abusos sexuales en 1998.
También, fueron disueltas con el voto de 75 de los 91 diputados, varias organizaciones, incluso empresariales, científicas y técnológicas, por no registrarse como agentes extranjeros como manda una polémica ley aprobada en 2020, informó el Legislativo.
Desde 2018, 440 agrupaciones han sido canceladas por el gobierno en el contexto de la crisis política que vive el país a raíz de las protestas sociales que estallaron ese año y dejaron 355 muertos y miles de exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.