Chilpancingo, Gro., Al menos 600 transportistas de esta capital bloquearon por más de siete horas la Autopista del Sol México-Acapulco, a la altura del Parador del Marqués, en demanda de mejores condiciones de seguridad, el esclarecimiento del homicidio de su líder, Francisco García Marroquín, y la presentación con vida de varios choferes que fueron privados de la libertad.

Una comisión de conductores se reunió ayer con el vicefiscal Ramón Gamboa, quien se comprometió a instalar un corredor de seguridad desde Chilpancingo hasta el Valle del Ocotito.

En la protesta, el gremio exigió justicia por el asesinato del dirigente de la Unión de Transportistas del Estado de Guerrero, Francisco García Marroquín, quien fue ejecutado el martes cuando circulaba por una de las avenidas más transitadas de la capital guerrerense.

Pidieron seguridad para los usuarios y para ellos en sus recorridos por las carreteras, el regreso de unos 40 habitantes del poblado de Buenavista de la Salud, quienes se vieron obligados a abandonar sus casas debido a la violencia, y la aparición con vida de cuatro personas desaparecidas, entre ellas dos taxistas.

Los conductores denunciaron que desde hace tres meses se ha incrementado el número de casos de violencia en su contra y también contra permisionarios del transporte público, quienes son víctimas de extorsión, homicidio, secuestro y robo de unidades.

Familiares de Francisco Imer Casarrubias, uno de los taxistas desaparecidos el pasado 7 de mayo en la comunidad de Cajeles, de la ruta Buenavista-Rincón de la Vía, demandaron a las autoridades que se siga investigando el paradero de este trabajador del volante.

La mayoría de los transportistas estaban molestos porque, según dijeron, se les obligó a participar en la manifestación. “No se vale. Perdimos un día de trabajo y no obtuvimos ninguna ganancia”, reprochó uno de los choferes de camionetas de pasajeros del poblado de Petaquillas, municipio de Chilpancingo. El mitin se inició a las ocho de la mañana y concluyó a las 15:30 horas.

Al menos 10 mil personas resultaron afectadas por el bloqueo. Estudiantes, maestros y empleados de gobierno que a diario se trasladan a la capital del estado no pudieron llegar a sus actividades debido a que no hubo transporte.

La protesta en la Autopista del Sol provocó congestionamiento y largas filas de automóviles y camiones varados rumbo a la Ciudad de México, Acapulco, la zona centro y la Costa Chica. Al contingente se sumaron trabajadores de las rutas de los municipios de Chilpancingo, Quechultenango, Tierra Colorada, Mochitlán, Tixtla, y Coyuca de Benítez, entre otros.