Colón, Qro., Con una inversión de 7 millones 500 mil dólares, Food Delivery, operador de Pizza Hut en México, inauguró –como parte de su plan de expansión en el país– una planta que producirá anualmente 14 mil toneladas de masa, equivalente a 31 millones de pizzas.
Jacobo Caller, director general global de Food Delivery Brands, dijo en entrevista que la empresa no ha reportado escasez de harina de trigo a causa de la invasión rusa a Ucrania, aunque reconoció que por la inflación –que ha llegado a 20 por ciento para la firma– han tenido que trasladar una parte al producto.
Las nuevas instalaciones ubicadas en Querétaro forman parte de una inversión global de 30 millones de dólares, la cual incluye la transformación de los restaurantes, la posibilidad de exportación de masa a Estados Unidos y Centroamérica, así como un millón de dólares para construir sus oficinas corporativas que saldrán de la capital del país.
La fábrica no sólo producirá las porciones exactas de masa para preparar los diferentes tamaños de pizzas en tienda, sino que será el hub de la marca en el país, ya que también capacitará ahí a los trabajadores y busca ser un laboratorio alimenticio de nuevos productos.
El directivo del operador global comentó que la guerra en Ucrania le ha pegado a la firma en los precios, pues si bien ya tenían una inflación de 12 por ciento en las materias primas antes del conflicto, se ha sumado 8 por ciento tras el inicio de la invasión.
Destacó que en conjunto con los proveedores han tenido que absorber parte de los costos, pero también han trasladado una fracción a los consumidores.
El directivo consideró que la coyuntura actual no afectará las inversiones que fueron anunciadas ayer. “Adaptaremos las inversiones globales del grupo en función de la economía”, dijo. “Nuestros planes siguen vigentes”.
Señaló que la inflación empobrece al consumidor y eso podría bajar el consumo, pero hasta el momento no ven “ningún síntoma de debilitamiento de la demanda”.
Comentó que en México 70 por ciento de los ingredientes que utiliza la cadena de pizzerías son de origen local, mientras el resto –parte de la harina de trigo– son importados.