Glasgow. La gesta deportiva de Ucrania por clasificarse a la Copa Mundial en medio del conflicto con Rusia continuará, tras el triunfo 3-1 conseguido ayer ante Escocia en una vibrante semifinal del repechaje.

El veterano capitán Andriy Yarmolenko encaminó la victoria, al marcar con un tiro bombeado a los 33 minutos y asistir después a Roman Yaremchuk, quien anotó de un cabezazo a los 49.

Ucrania dominó casi todo el encuentro para un merecido triunfo, aunque tuvo que resistir un intento de Escocia por acercarse, lo que llevó al gol de Callum McGregor a los 79 minutos, antes de que el suplente ucranio Artem Dovbyk se desmarcara para sentenciar el duelo en los descuentos (90+5).

Dovbyk llevó a sus compañeros a una esquina del estadio para compartir el festejo con los cerca de 3 mil aficionados ucranios entre el público de 51 mil personas. Aplaudieron unos a otros con las manos levantadas sobre la cabeza.

El domingo, Ucrania enfrentará a Gales en el duelo por el boleto al Mundial. El ganador en Cardiff viajará a Qatar en noviembre para jugar en el grupo ante Inglaterra, Estados Unidos e Irán.

El conjunto de Kiev mostró un buen desempeño a pesar de que seis de sus titulares no habían dispu-tado ningún encuentro competitivo desde diciembre. La mayor par-te del plantel juega en la liga local, que fue suspendida tras el conflicto bélico. El repechaje original en Glasgow, previsto para marzo, se pospuso.

La FIFA y Escocia acordaron darle más tiempo a la selección amarilla a fin de prepararse para el encuentro.

Los ucranios ingresaron al campo con la bandera azul y amarilla en sus hombros. Recibieron una calurosa bienvenida y el himno nacional Shche ne vmerla Ukrainas fue aplaudido por los aficionados escoceses. Muchos de ellos se quedaron tras el juego para vitorear a sus adversarios.

Algunos aficionados viajaron desde lejos y tienen planes de seguir en Reino Unido para el duelo el domingo.

Antes del partido, Pelé pidió al presidente ruso Vladimir Putin que se detenga, en una carta publicada en sus redes sociales. “Quiero utilizar el partido de hoy como una oportunidad para hacer un pedido: detenga esa invasión. No existen argumentos que justifiquen la violencia”, dice la misiva dirigida a Putin que el ex futbolista brasileño de 81 años escribió “personalmente”, según su mensaje junto a la publicación.