Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, buscará un consenso regional en torno a una nueva agenda económica que se base en los acuerdos comerciales existentes con América Latina y espera presentar un plan que haga frente a la migración cuando sea el anfitrión de la novena Cumbre de las Américas, a celebrarse este mes en Los Ángeles, California, dijeron ayer altos funcionarios estadunidenses consultados por Reuters y Ap.

Al adelantar las prioridades de Biden para las conversaciones de alto nivel en Los Ángeles la próxima semana, las fuentes citadas por Reuters comentaron que su mensaje será que “no podemos hacer negocios como siempre” en el hemisferio, pero ofrecieron pocos detalles sobre cómo abordarían los retos expuestos por la pandemia de covid-19.

Los preparativos de la cumbre se han visto marcados por advertencias de que no asistirán al encuentro formuladas por algunos líderes de la región, incluido el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, si se excluye a Cuba, Venezuela y Nicaragua. Washington espera que el mandatario mexicano asista, pero confía en que su ausencia no restará valor a los esfuerzos para abordar la migración ni dañará la cooperación en la frontera sur de Estados Unidos, dijo a periodistas un funcionario, quien habló bajo condición de anonimato.

Altos funcionarios consultados por Ap, que declinaron ser identificados, restaron importancia a las preguntas sobre si el mandatario mexicano estará presente, aunque insistieron en que el evento es una oportunidad importante para que se reúnan los mandatarios.

Uno de los objetivos de esta cumbre será ayudar a la región a recuperarse de la economía de la pandemia. “Vamos a usar la cumbre para alinear a los líderes regionales, el sector privado y la sociedad civil detrás de una nueva y ambiciosa agenda económica para América Latina y el Caribe que creo que busca construir sobre los acuerdos de libre comercio existentes que tenemos en el hemisferio occidental”, detalló un funcionario consultado por Reuters.

Al preguntarle si la cumbre podría producir una propuesta para una iniciativa comercial regional similar al marco para un bloque económico de 13 países entre Estados Unidos y Asia, el funcionario dijo: “No haría ninguna comparación”.

El enfoque del presidente Biden será aprovechar los acuerdos comerciales que ya están vigentes, apuntó. Éstos podrían incluir el Tratado México, Estados Unidos y Canadá, además de pactos bilaterales con otras naciones latinoamericanas.

Con Biden enfrentando presiones internas por cifras récord de migrantes que intentan ingresar a su país por la frontera con México, se espera que busque ayuda para detener el flujo de personas hacia el norte.

La cumbre producirá una “declaración” que abordará la migración, incluido un paquete de anuncios, según un segundo funcionario. “No será vinculante, pero será muy progresista”, agregó la fuente, aunque ofreció pocos detalles.

El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, abogó por una participación más inclusiva en la cumbre “para hablar de lo que nos une y dejar de lado lo que nos desune”. No condicionó su asistencia a que no haya exclusiones.