A diferencia de años anteriores, cuando sólo cumplían labores administrativas, desde enero de 2022 los empleados de las Unidades Básicas de Atención (conocidos como ubas) de la Secretaría de Bienestar los pusieron a realizar el mismo trabajo de campo que llevan a cabo los Servidores de la Nación, pero sin recibir el mismo salario y sin acceso a prestaciones básicas.
Trabajadores afectados denunciaron lo anterior y señalaron que sus contratos se renuevan cada mes –lo que les impide generar antigüedad– y a ellos se les considera únicamente como “prestadores de servicios” y no como empleados del gobierno, además de que no se mencionan su horario ni sus días laborales.
Bajo condición de anonimato por temor a represalias, los declarantes explicaron que en años pasados realizaban únicamente tareas de oficina, mientras que los servidores eran enviados a campo a recabar datos de los beneficiarios de programas sociales y a entregarles tarjetas, entre otras labores.
Sin embargo, a partir de enero de este año los empleados de ambas dependencias fueron enviados a cubrir prácticamente el mismo trabajo, pero con menos salario para los primeros, sin el derecho que tienen los servidores, quienes reciben viáticos y disfrutan de prestaciones básicas.
Una diferencia es que los Servidores de la Nación ganan 9 mil 35 pesos netos al mes y los ubas perciben 7 mil 900 y su pago es cada 30 días. Además, “aunque no somos outsourcing, no tenemos prestaciones mínimas necesarias como seguridad social. Cuando nos enfermamos, nosotros pagamos todo”.
Les dan recursos del concepto adultos mayores
Por lo que se refiere a su convenio, antes de 2022 los documentos de contratación sí mencionaban sus horarios y días laborales, pero dicho aspecto se eliminó. De igual forma, el recibo de pago únicamente muestra el depósito bancario y la leyenda “adultos mayores”, como si los trabajadores fueran beneficiarios de dicho esquema de apoyo social.
Los denunciantes admitieron que ellos y muchos de sus compañeros realizan esta labor por necesidad de tener un empleo, “pero de todas formas cada mes estamos en la tablita, firmando contratos posfechados. Muchos siguen nada más porque se sienten identificados con este gobierno y son amantes de la 4T”.
Dijeron que desconocen el origen de las irregularidades laborales. “No sabemos si es por ahorrar dinero, pero no pedimos nada extraordinario, sólo que seamos considerados trabajadores”.
La Jornada solicitó a la Secretaría de Bienestar un posicionamiento sobre la denuncia, pero hasta el momento no ha recibido respuesta.