Dubai. Los ingresos por exportaciones energéticas de Irán aumentaron 60 por ciento en los dos primeros meses del año iraní (del 21 de marzo al 21 de mayo) en comparación con el mismo periodo del año anterior, declaró ayer un funcionario del Ministerio de Petróleo a la agencia de noticias Shana.
La fuente no dio una razón para el salto en los ingresos, que se produce mientras los precios del petróleo casi se han duplicado respecto del año pasado debido a la guerra en Ucrania y a la recuperación económica mundial después de la pandemia.
El gobierno iraní asegura que sigue exportando petróleo a pesar de las sanciones estadunidenses reimpuestas en 2018, después de que el entonces presidente Donald Trump se retiró de un acuerdo para restringir el programa nuclear de Teherán.
Las conversaciones para reactivar el pacto de 2015 y permitir que se eliminen las sanciones de Estados Unidos, han estado en suspenso desde marzo, principalmente por la insistencia de Teherán en que Washington elimine a la Guardia Revolucionaria de la lista de organizaciones designadas como terroristas.
En tanto, la Unión Europea manifestó su preocupación sobre la “inaceptable” incautación que realizó Irán sobre dos barcos griegos en el Golfo Pérsico.
La Guardia Revolucionaria de Irán capturó el viernes pasado dos petroleros griegos en aguas del golfo, en medio de las tensiones entre ambos países después de que Atenas incautó el petrolero iraní Pegas y trasladó su carga a Estados Unidos.
“Hemos planteado inmediatamente esta cuestión con las autoridades iraníes por estos actos y pedimos una rápida aclaración, resolución y reducción de la tensión”, indicó la UE.
Sin embargo, Bruselas también ha explicado a Irán que sigue en “estrecho contacto” con las autoridades griegas sobre la situación del Pegas.