Nuevo Laredo, Tamps. Américo Villarreal Anaya, candidato de la alianza Morena, PVEM y PT, aseguró hoy que todas las instituciones de justicia del Estado han sido cooptadas por el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca y el candidato a la gubernatura César Verástegui Ostos, de la alianza PAN-PRI.
En rueda de prensa, en esta ciudad fronteriza, Villarreal Anaya dio a conocer un documento con el que respaldó que la actual campaña electoral, ha sido ensuciada, y dijo que ambos promueven “unas elecciones de Estado, violando toda regla”, y tratan de “manipular a la opinión pública”.
Añadió que en su contra “abren carpetas ilegales, sin sustento, usan intensamente el terrorismo judicial, detienen, amenazan, extorsionan y persiguen, con el objetivo de dañar moralmente y causar perjuicio a mi campaña”.
Luego de rechazar que toda acusación en su contra es falsa, aseveró que tanto el mandatario como “su candidato”, “no han presentado una sola prueba que sustente sus acusaciones”, y los acusó de esconderse “detrás de falsas acusaciones y falsos medios de comunicación”. Y que él, en cambio, da la cara, “a decir la verdad y a denunciar lo que ellos están intentando.
Villarreal Anaya informó que en las últimas horas han presentado dos demandas adicionales: la primera por usurpación continuada del título de ingeniero por parte del Truko Verástegui, quien desde hace mucho tiempo se la ha pasado diciendo que es ingeniero pero no lo es.
La segunda, una denuncia de intervención ilegal de comunicaciones que han practicado de manera reiterada el Gobernador Cabeza de Vaca y el Truko Verástegui.
Explicó que en el transcurso de su campaña se han presentado más de 70 denuncias en las diferentes instancias electorales, pero las autoridades correspondientes han dilatado la resolución de asuntos desde el mes de enero en especial aquellos vinculados con sanciones al Ejecutivo del Estado, al candidato César Verástegui Ostos o de aquellos servidores públicos emanados de Acción Nacional.
“El gobernador Cabeza de Vaca decidió ser el artífice y jefe de campaña de un candidato que ha resultado ser una vergüenza pública, usando para ello todos los recursos del poder, y la capacidad de compra y coacción que tiene el gobierno, que ha puesto al servicio de un intento absurdo: transformar una derrota irreversible en una victoria amañada”, indicó.
“Su gestión tiene los días contados. Esta falsa paz del miedo y de las amenazas, no la quiere nadie”, finalizó.