La recuperación del crédito que los bancos otorgan a las empresas es lenta, caso contrario al de consumo, que ha logrado dinamizar su crecimiento en los meses recientes, afirmó BBVA México.

De acuerdo con el estudio Situación banca, realizado por el área de investigación del banco, el saldo del financiamiento a empresas hasta el mes de marzo cayó 2.8 por ciento, mientras que el de consumo logró incrementarse 2.8 por ciento.

Debido a la baja inversión que hay en el país los consorcios se han abstenido de pedir créditos bancarios, mientras que los hogares han incrementado su demanda aunque, principalmente, con el fin de contener los impactos de la inflación.

“En marzo de 2022, el crédito a empresas presentó una contracción real anual –descontando el efecto de la inflación y de la valuación del tipo de cambio– de 2.8 por ciento contra un crecimiento de 3.9 por ciento en términos nominales, acumulando con este resultado 20 meses consecutivos de caídas, que tocaron su punto más álgido en abril y mayo de 2021, con una contracción de 16.2 por ciento en ambos meses”, puntualizó BBVA.

Expuso que la reactivación de la inversión ha sido lenta después de superar el efecto base asociado a la pandemia y ha mostrado un efecto rezagado para impulsar la demanda de crédito por parte de las empresas.

“Aunado a ello, durante 2021 el débil desempeño del crédito a las empresas también pudo haber respondido a que algunas contaban con reservas acumuladas provenientes de la importante disposición de líneas de crédito que hicieron al inicio de la pandemia y que mantuvieron como depósitos a plazo para posteriormente utilizarlos”, mencionó el banco. La institución detalló que un crecimiento más vigoroso de la inversión podría impulsar una mayor demanda por financiamiento; sin embargo, al primer trimestre del año aún no hay señales de que este impulso se consolide en el mediano plazo.