Montevideo. El Programa Mundial de Alimentos (PMA) informó ayer que aumentó en más de medio millón el número de personas con inseguridad alimentaria severa en América Latina y el Caribe entre diciembre y marzo pasados. Son 9.3 millones de habitantes los afectados en los países de la región en los que el programa está presente.
La directora regional del PMA, María Dolores Castro, explicó que “millones de personas podrían verse empujadas a la pobreza y la inseguridad alimentaria si continúa el conflicto en Ucrania”, dado que generó un incremento en los costos de la materia prima y la energía.
La organización asegura que aumentaron 27 por ciento los precios promedio de arroz, frijoles negros, lentejas y aceite vegetal en la región durante el primer cuatrimestre del año, y 111 por ciento entre enero de 2019 y abril de 2022.
“Podríamos volver a los puntos máximos de inseguridad alimentaria del punto álgido de la pandemia, ya que la pérdida de empleos e ingresos, la inflación y otros factores impactan a las personas más vulnerables”, advirtió Castro.
“La región ya está lidiando con la covid-19, el aumento de los costos y los extremos climáticos”, expresó la directora regional.
Prevén tendencia negativa por la guerra
La semana pasada, la alta comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, advirtió que la elevada carestía generará un aumento de la tensión en América Latina.
“La guerra en Ucrania ha provocado y va a continuar haciéndolo, una crisis tridimensional en los alimentos, la energía y las finanzas, y esto va a tener un impacto serio en América Latina y el Caribe”, declaró Bachelet en un foro económico. “Vamos a ver una gran inquietud y tensión política” en una región que “ya ha sido impactada por la covid-19”, agregó.
“El precio alto de los alimentos normalmente crea tensión social de manera tal que hay que pensar y prepararse para esto”, advirtió la comisionada.
La inseguridad alimentaria califica situaciones cuando la ingestión de comida es insuficiente para la salud humana y puede ser temporal, transitoria o severa, de acuerdo con los conceptos de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
El PMA estima que, si la guerra continúa, el hambre podría afectar a 13.3 millones en la región.