Padres de los 43 normalistas desaparecidos de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos, de Ayotzinapa, Guerrero, “están decepcionados de este gobierno” porque no hay avances en las investigaciones para encontrar a los estudiantes, señaló Vidulfo Rosales, abogado de los familiares de las víctimas.
“Hay una total desesperación, enojo. Los padres de familia lo que ven es una decepción de este gobierno. Ellos le apostaron, creyeron, fueron a los diálogos que el gobierno llamó, decidieron transitar por la ruta del diálogo, de las mesas de trabajo y, pues, no hubo nada. Ellos lo ven como una decepción de que este gobierno no cumplió con lo que prometió y lamentablemente ven que ya dio lo que tenía que dar. Respecto al caso Ayotzinapa, creemos que no va a haber más”, reiteró.
Al cumplirse 92 meses de la desaparición de los normalistas en la ciudad de Iguala, los familiares marcharon del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez, como parte de la acción global para exigir una vez más la presentación con vida de los estudiantes. “Vivos se los llevaron! ¡Vivos los queremos!”, corearon durante su trayecto por Paseo de la Reforma. También realizaron pase de lista y llevaron pancartas con los rostros de los 43 normalistas ausentes.
A decir de Rosales, entre los “grandes pendientes” está la extradición de Tomás Zerón de Lucio, jefe de la extinta Agencia Federal de Investigación Criminal en el sexenio pasado, para que sea procesado en el país. “El otro tema es que hay una dilación de la Fiscalía General de la República, y aún no envía varios documentos con motivo de dicha extradición.
“Hay obstáculos que ponen los propios funcionarios de la FGR. Hay mucha lentitud de esta institución en las investigaciones, así como la información que tiene el Ejército Mexicano, ya que de acuerdo con los datos de prueba que tenemos, tiene un gran acervo que acumuló a partir del monitoreo, del seguimiento e intercepcion de teléfonos que hizo y que en tiempo real estuvo enterado de lo que ocurrió en 2014”.
Añadió que no les habían informado de la extradición a Estados Unidos de Adán Casarrubias Salgado, hermano de Sidronio Casarrubias, líderes de Guerreros Unidos, este último señalado como partícipe en el caso de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos en Iguala, Guerrero.