La Organización Mundial de la Salud (OMS) ordenó nuevos protocolos para identificar la hepatitis aguda de origen desconocido, por eso cambió a “pendiente” el primer dictamen sobre la causa de la muerte de un niño de tres años de edad vecino del munici-pio de Tulancingo, fallecido la semana pasada en el Hospital La Raza del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), y que apuntaba a que pereció por ese mal, informó la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH).
En tanto, se detectó en Nayarit un caso sospechoso de hepatitis aguda infantil grave en un bebé de cuatro meses de edad.
La SSH informó el pasado 19 de mayo que, según análisis practicados por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre), el menor que ante la gravedad de sus síntomas fue trasladado en helicóptero del hospital del IMSS de Tulancingo al de La Raza, en la Ciudad de México, murió por la variante de hepatitis reportada por primera vez a inicios de abril anterior en Gran Bretaña.
La SSH aclaró que el Comité Nacional para la Seguridad en Salud le notificó que efectuará al niño otros estudios, por los nuevos protocolos de la OMS. Así, el diagnóstico de la causa de muerte será “pendiente” hasta que se reciban los resultados de nuevos análisis moleculares del Indre.
El secretario de Salud hidalguense, Alejandro Efraín Benítez, dijo ayer en entrevista colectiva que un grupo especial da un seguimiento minucioso al caso del niño de Tulancingo, y busca determinar si el padecimiento por el cual perdió la vida tiene relación con el covid-19.
Mientras, el titular de la Secretaría de Salud de Nayarit, Francisco Munguía, dio a conocer que un bebé de cuatro meses fue enviado a Guadalajara, Jalisco, para otorgarle atención especializada, pues se le diagnosticó como sospechoso de hepatitis aguda infantil grave. Mencionó que se esperan los resultados de estudios practicados al infante por el Indre para con-firmar o descartar que el pequeño sea el primer caso de la dolencia en la entidad.