Ha pasado un año desde que la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por su sigla en inglés) quitó la categoría uno de seguridad aeronáutica a México, situación que ha representado una pérdida de entre 5 mil millones y 15 mil millones de pesos a la aerolíneas del país, de acuerdo con especialistas del sector.
Luego de que el 25 de mayo de 2021 se redujera la clasificación de México, funcionarios del gobierno federal aseguraron que ésta se recuperaría en cuatro o seis meses. No obstante, los recortes al presupuesto a la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), una de las causas que detonaron la baja de categoría, ocasionaron una merma de 110 millones en contraste a cuando inició la actual administración.
Tras el primer tramo de crisis por la pandemia de coronavirus, la FAA redujo de uno a dos la categoría de la seguridad de operación en México; argumentó que la AFAC no contaba con inspectores y regulación suficientes para supervisar a las aerolíneas del país, de acuerdo con los estándares de la Organización de Aviación Civil Internacional.
La auditoría que derivó en la reclasificación señaló 28 hallazgos, que según la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) ya fueron solventados. No obstante, a punto de cumplirse el año de esta baja, los funcionarios de la FAA pospusieron indefinidamente su visita para una revisión técnica prevista del 23 al 27 de mayo.
Una de las causas de la reducción a categoría dos se debe a que “no hay suficientes inspectores para supervisar licencias de pilotos y aeronaves. ¿Por qué? Porque no hay suficiente presupuesto”, explicó Fernando Gómez, especialista del sector aeronáutico, que –derivado de esta situación– estima una pérdida de 5 mil millones de pesos para las aerolíneas.
La Secretaría de Hacienda reporta que en 2018 a la entonces Dirección General de Aeronáutica Civil, ahora AFAC, se le aprobó un presupuesto de 594 millones de pesos; el cual se fue recortando año con año hasta llegar a 364 millones de pesos para el ejercicio 2021. Luego de la baja en categoría, la AFAC cuenta con 484 millones de pesos para 2022.
Pablo Casas Lías, director general del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico Aeronáuticas (Inija), explicó en el sector aeronáutico la columna vertebral es la AFAC, pero ésta “ha demostrado que no es una autoridad autónoma”, no ha pedido estudios técnicos que den soporte al nuevo espacio aeronáutico ni muestra capacidad para supervisar a las aerolíneas.
Esto se ve en los programas de medicina de aviación, en la expedición de licencias, de permisos y talleres aeronáuticos, detalló.
Casas Lías estima que las pérdidas para las aerolíneas mexicanas alcanzarían 15 mil millones de pesos, al no poder incrementar sus rutas a Estados Unidos. Además, el protocolo para la nueva auditoría que permita recuperar la categoría uno toma alrededor de 3 meses. Así que, con el aplazamiento de la visita de la FAA, “ya se fue prácticamente también este año”, lamentó.
