Guadalajara, Jal., De 300 a 500 aumentaron las zonas susceptibles de inundación en el área metropolitana de Guadalajara, advirtió el investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Luis Valdivia Ornelas, tras presentar un atlas de riesgos actualizado, en el que señala que el crecimiento urbano desmedido de los últimos cuatro años contribuyó a hacer más peligrosa la ciudad durante el temporal.
Explicó que en la capital una tormenta puede significar una serie de tragedias debido a las inundaciones, las cuales se han incrementado por la invasión de cauces y cuencas sobre todo por obras habitacionales.
Valdivia Ornelas, investigador del Departamento de Geografía y Ordenación Territorial de la UdeG, dijo “a partir de los 500 puntos de inundación que hemos documentado, también definimos que hay 54 áreas prioritarias donde la incidencia de las inundaciones es alta, se presentan al menos una vez al año y alcanzan hasta 1.5 metros de altura”.
Aunque pronosticó que el temporal por llegar será “normal”, con una precipitación promedio de 930 milímetros, es previsible que el escenario sume “70 anegaciones importantes”.
Explicó que en la ciudad no se necesitan lluvias fuertes para que se genere una inundación, basta una precipitación de 15 milímetros por una hora, para que haya encharcamientos.
El crecimiento urbano transforma los cauces
“Otra variable es que el crecimiento urbano transforma los cauces, pueden desaparecer, se ven segmentados o pierden capacidad de conducción debido a invasiones o cambios en la geometría”.
Ejemplificó que dicha situación ocurre en la zona de la avenida Juan Palomar y Arias, en Zapopan, donde dicha vialidad cortó de tajo los escurrimientos provenientes del Bajío y San Juan de Ocotán, que dan origen al río Atemajac.
También afirmó que el drenaje está rebasado, pues data de 40 a 50 años, lo que ha provocado que en las recientes dos décadas las inundaciones se disparen tanto en severidad como en recurrencia y altura de la lámina de agua, además de la velocidad de las corrientes que se forman, lo que las convierte en escenarios más peligrosos.
