Tras el amago que la semana pasada hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador a la empresa energética Vitol de que debía entregar la información sobre los funcionarios de Pemex a quienes dio sobornos, o de lo contrario no podría seguir operando en México, la compañía proporcionó los datos a las autoridades federales.
Así lo informó ayer en su conferencia matutina el propio mandatario federal: “les tengo una buena noticia, ya dieron los nombres”.
El mandatario aprovechó una pregunta sobre probables actos de corrupción en la UNAM para abordar el caso de Vitol –de capital holandés–, a la que el pasado día 10 demandó entregar los datos de los directivos de la empresa productora del Estado que recibieron dinero a cambio de darle contratos.
“Que haya transparencia es una regla de oro de la democracia. Aquí tratamos un fraude en Pemex, de Vitol, se les hizo fácil, porque se arreglaron en Estados Unidos –en un juicio– y llegaron a un acuerdo (en aquel país). Luego vinieron con nosotros a decirnos ‘vamos a reparar el daño, les vamos a pagar’. Sí, lo aceptamos (respondió el gobierno), pero ¿quiénes fueron los que extorsionaron, los que recibieron los moches? ‘No, es que no podemos decirlo’ (habría dicho la compañía en su momento). Ah, entonces no”, advirtió López Obrador.
Sin embargo, señaló, la empresa ha cambiado de postura y otorgó la información. Sin embargo, el Ejecutivo no quiso dar a conocer los nombres de los implicados. Sólo refirió: “uno estuvo activo hasta 2019, eran del área internacional de Pemex. Ya se va a proceder”. Sin embargo, acotó, falta la reparación del daño”, aunque dijo desconocer a cuánto ascendería la cifra.
Por otro lado, acometió de nuevo contra la UNAM, que “se cundió de derechismo” y existe una “burocracia dorada. Yo he hecho aquí algunos planteamientos, y se han malinterpretado, porque me interesa mucho que esta institución importantísima, histórica de nuestro país, lo siga siendo, que no se mantengan cotos de poder, influyentismo; que no coopten a investigadores, a maestros, que no castiguen a quienes no están de acuerdo con las posturas antineoliberales, porque se llegó al extremo de que la mayoría de los maestros eran aplaudidores del régimen de corrupción, y estoy hablando de las ciencias sociales”.
Agregó que con el presupuesto “se premiaba a gente, se les creaban institutos especiales; se fue creando una especie de burocracia dorada, y los profesores de asignatura ganando muy poco. Eso no significa que estemos en contra de la UNAM, sino que hay que revisar eso. ¿Cómo es posible que salga una gente cuestionada por mal manejo en una instancia y se va a la UNAM como premio? O la posibilidad de corrupción o el tardar tanto tiempo sin clases presenciales”, tras la pandemia.
En otro tema, dijo que su gobierno prepara un aumento salarial para soldados, marinos, policías, personal de salud y burócratas.