Durante la sesión de ayer de la Comisión Permanente, diputados y senadores de Morena y PT exigieron respeto para los médicos cubanos, dejar de discriminarlos y de esparcir mentiras y calumnias sobre su capacidad profesional y el pago que recibirán por venir a trabajar a las zonas más apartadas del país.

El grupo mayoritario y sus aliados salió al paso de las afirmaciones de panistas, entre ellas de la senadora Kenia López Rabadán, quién armó un escándalo porque no se le permitió excederse en el tiempo en tribuna, y sostuvo que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador destinó 255 millones de pesos para el pago de sueldos de “585 supuestos doctores cubanos”, que contrató durante la pandemia de covid-19.

Aseguró que ello significa que cada médico ganó 140 mil pesos al mes, dijo, misma cantidad que a su juicio se pagará a los 500 galenos que vendrán de La Habana, de acuerdo al convenio firmado por López Obrador con el gobierno de Miguel Díaz- Canel.

Igualmente, la senadora de Grupo Plural, Nancy de la Sierra, sostuvo que para justificar la contratación de 500 cubanos, el Presidente empleó críticas y argumentos infundados contra los doctores mexicanos y la UNAM..

La diputada de Morena, Yeidkol Polevnski, les respondió tajante: “Serénense, porque dicen muchas burradas”, y aclaró que “de manera dolosa manejan cifras”. Sumaron todo lo que implicó el convenio a salarios, pese a que incluye otros servicios, vacunas y capacitación.

Un diputado del PT agregó que es como si el presupuesto del Senado se dividiera entre los 128 senadores y se señalara que cada uno gana 36 millones de pesos.

Polevnski recalcó que el Convenio en Materia de Salud con el Gobierno de Cuba, recién firmado, se justifica porque en México hay un déficit de 200 mil especialistas debido a que los gobiernos del PAN y PRI no invirtieron en su formación ni en el sector salud. Al año se ofrecían 9 mil plazas, aunque había 40 mil aspirantes.

Durante la 4T casi se ha triplicado esa oferta y en 2021 se abrieron 18 mil 608 plazas para médicos y se ha invertido en la formación de especialistas, ya que al inicio del sexenio sólo se contaba con 146 mil 300, cuando deberíamos tener 219 mil.

El senador del PT Miguel Ángel Lucero expuso a su vez que hay incluso un tema de racismo y discriminación de parte de los panistas, que no habrían hecho tal escándalo si los contratados fueran de Estados Unidos o Francia. Para hablar de Cuba, los panistas “lo primero que tendrían que hacer es lavarse la boca”, agregó Polevnski.

Los morenistas refutaron también las afirmaciones de López Rabadán, quien acudió a la sesión con una camiseta de la UNAM, del diputado Jorge Espadas y otros legisladores del PRI, como el senador Jorge Carlos Ramírez Marín, en el sentido de que el presidente López Obrador ataca a la máxima casa de estudios.

Si alguien ha defendido la enseñanza pública es el Presidente, no la derecha que siempre estuvo a favor de las universidades privadas, dijo el diputado Leonel Godoy.