Los médicos especialistas de Cuba cuentan con la formación académica, experiencia y mística de servicio que garantiza una atención de calidad para los pacientes, como demostraron en 2021, cuando colaboraron con México en la atención de enfermos de covid-19 en el Hospital General de Tláhuac del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), afirmó Ramiro López Elizalde, director normativo de Salud del organismo.
En entrevista con La Jornada, el funcionario recordó que el entonces nuevo nosocomio no podía empezar a funcionar por falta de personal. La convocatoria que se lanzó en 2020 para cubrir las plazas de especialidad no tuvo respuesta en el país.
Por ello, ante la urgencia de contar con el servicio de hospitalización por el crecimiento acelerado de contagios del coronavirus, el gobierno de México firmó un convenio de colaboración con la isla, con lo que en diciembre de 2020 llegaron 200 médicos y enfermeras. “En 10 días pudimos abrir 300 camas del hospital y recibir a los pacientes.
Actualmente, la Estrategia Nacional de Salud para el Bienestar requiere de especialistas, y 500 plazas serán cubiertas con profesionales de Cuba.
López Elizalde destacó que en el Issste también hay vacantes. Señaló el caso de tres hospitales: el recién inaugurado en Tabasco, uno en Nayarit y otro que no ha podido empezar a funcionar en Oaxaca.
Rechazó las descalificaciones que se han hecho a los médicos de Cuba. Todas son falsas, enfatizó, y recordó que cuando llegaron al Hospital de Tláhuac “no tuvimos que enseñarles nada; si acaso un recorrido por las instalaciones, las diferentes áreas y los equipos”. Aseguró que su currículo respalda su preparación y entrenamiento en el manejo de cuadros graves de covid-19. Eran especialistas en neumología, terapia intensiva, anestesia y medicina interna, entre otros.
Subrayó, además, la mística de servicio de los cubanos, quienes se sentaban junto a los pacientes, los tomaban de la mano y con frecuencia identificaron enfermedades que no tenían relación con el covid-19 y también requerían atención, incluso alguna cirugía.
Consideró que ese compromiso social se ha perdido entre los profesionales de la salud en México, muchos de los cuales están concentrados en ganar dinero. Por eso no responden a las convocatorias que, en diferentes momentos, ha realizado el Sistema Nacional de Salud, en particular el Issste, para contratar especialistas que se necesitan en lugares alejados de las grandes ciudades.
Recordó varios casos de sus colegas que lo buscaron durante la pandemia, con el supuesto interés de obtener una de las plazas, siempre que fuera para trabajar en alguno de los hospitales de la Ciudad de México y en el turno matutino. Incluso, recordó, en el periodo de contratación para el hospital de Tláhuac, “llegó uno y me dijo que aceptaba, pero no vería enfermos de covid-19, cuando era eso lo que estábamos necesitando”.
Actualmente, el instituto tiene abierta una nueva convocatoria para la contratación de 140 especialistas en diversos hospitales de la República. Luego de 15 días, se han inscrito seis personas, afirmó.