Dubái. Un cineasta iraní galardonado en algunos festivales internacionales señaló que las autoridades allanaron las oficinas y casas de varios cineastas y otros profesionales de la industria y arrestaron a algunos de ellos.
Mohammad Rasoulof, cuyos trabajos han sido censurados en su país, señaló en un comunicado firmado por decenas de profesionales de la industria del cine en su cuenta de Instagram el sábado por la noche que las fuerzas de seguridad realizaron algunos arrestos y confiscaron equipos de producción de cintas durante redadas realizadas en los días pasados. El comunicado condenó las acciones y las calificó de “ilegales”.
En otra publicación de Instagram, Rasoulof, que no fue el objetivo de las redadas recientes, identificó a dos de los cineastas detenidos como Firouzeh Khosravani y Mina Keshavarz.
Los medios y las autoridades iraníes no han comentado sobre las redadas y no hubo detalles adicionales disponibles de inmediato. Las autoridades arrestan ocasionalmente a activistas en campos culturales por presuntas violaciones de seguridad.
Rasoulof ganó el primer premio del festival de cine de Berlín en 2020 por su película There Is No Evil. Cuenta cuatro historias vagamente conectadas con los temas de la pena de muerte en Irán y las libertades personales bajo la tiranía.
Poco después de recibir el premio, fue sentenciado a un año de prisión por tres películas que hizo y que las autoridades consideraron “propaganda contra el sistema”. Su abogado apeló la sentencia. También se le prohibió hacer películas y viajar al extranjero.
Las autoridades conservadoras de Irán controlan todas las palancas del poder en Irán. Durante mucho tiempo han visto diversas actividades culturales como parte de una “guerra blanda” de Occidente contra la República Islámica.