Legisladores de Morena respaldaron la política del presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de seguridad, y deploraron que la oposición utilizara su afirmación de que se evitan confrontaciones sangrientas de las fuerzas armadas con la delincuencia organizada para atacarlo.
Antares Vázquez (Morena) destacó que el Presidente de la República dejó claro que los elementos del Ejército, que en un video se les ve perseguidos por presuntos integrantes de un cártel del narcotráfico, actuaron con responsabilidad, ya que no se confrontaron con los delincuentes para evitar derramamiento de sangre, incluso de civiles.
La afirmación del Ejecutivo de que su política es cuidar tanto a los miembros de las fuerzas armadas como a los de las bandas criminales, que también son seres humanos, “no significa que se proteja al narco, quienes arroparon a los capos e hicieron pactos con ellos fueron los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón”. Este último, recordó, “provocó un baño de sangre, del que todavía no podemos librarnos”.
Sin embargo, el panista Damián Zepeda exigió a López Obrador cambiar “su fracasada estrategia de seguridad para garantizar paz a todos los mexicanos, no protección a los miembros de las bandas”, y le preguntó si dará “mas abrazos a los criminales”. Igualmente, su correligionaria Josefina Vázquez Mota, en su cuenta de Twitter recordó al Ejecutivo federal que “a los criminales no hay que cuidarlos, hay que llevarlos ante la justicia”.
Antares Vázquez les recordó que en México no hay pena de muerte, y el Estado no puede dedicarse a asesinar a integrantes de la delincuencia organizada, como pretende el PAN. “El Presidente “está demostrando que la política de ‘mátalos en caliente’ lo único que hizo fue meternos en la violencia que hoy vivimos, y que está imparable”.
Eso no quiere decir, agregó, que se les proteja; se les aplicará la ley, para que haya justicia y “mitigar poco a poco la violencia que nos dejaron”. La derecha, afirmó, hubiera querido “un encontronazo entre el Ejército y los narcos, con mucho derramamiento de sangre, para luego acusar al Presidente de represor”.
José Narro, también senador de Morena, recordó que atrás quedó la estrategia de acabar con el enemigo, sin importar la violencia y las muertes de inocentes, a los que Calderón y Peña consideraban “daños colaterales”. El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, comentó que “toda política de seguridad debe tener un contenido sobre derechos humanos”, pero admitió que le preocupa que se “merme el prestigio del Ejército”.