La presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Flora Tania Cruz Santos, resaltó que para 2023 el programa La Escuela es Nuestra buscará atender a los alumnos de más de 113 mil planteles.
En el marco de los foros para revisar las Escuelas de Tiempo Completo, la legisladora de Morena llamó a no politizar el tema y centrarse en rescatar sus beneficios, ya que la intención del nuevo programa es mejorar la atención en los centros escolares.
“Desde un principio he pedido a diputados y a quienes participan en las mesas que no se carguen en la política, vale la pena dejar a un lado las filias y fobias”y entrar al tema de los beneficios del nuevo programa.
Detalló que “de las 27 mil 67 escuelas que actualmente atendía las Escuelas de Tiempo Completo, se proyecta para 2023 que se van a atender 113 mil escuelas y de los 3.2 millones inscritos, se brindará educación a más de 8 millones de alumnos”.
Asimismo, expuso que las proyecciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP) se podrán realizar, siempre y cuando el pleno de la Cámara Baja apruebe los recursos en el Presupuesto de Egresos de la Federación del próximo año.
Tarea incompleta
Hizo notar que el programa de Escuelas de Tiempo Completo, a pesar de ser muy noble y con una proyección importante, no estaba cumpliendo al 100 por ciento con el objetivo de avanzar en el logro educativo, el abandono y principalmente el rezago escolar.
Recordó que en su reciente reunión con los integrantes de la Comisión de Educación y de la Junta de Coordinación Política, la titular de la SEP, Delfina Gómez, solicitó la ampliación de recursos por 32 mil millones de pesos para el próximo año.
Por su parte, la jefa de Educación en Unicef México, Astrid Hollander, resaltó que recibir una alimentación saludable en las escuelas puede contribuir a mejorar los hábitos y una buena dieta, pero al mismo tiempo se vincula con mejorar logros de aprendizaje y rendimiento escolar.
Algunas recomendaciones para La Escuela es Nuestra, dijo, son: integrar y mantener los componentes de apoyo alimentario y jornada escolar extendida, simplificar y facilitar la operación del programa, mantener un sistema de control y rendición de cuentas, considerar asesoramiento y capacitación a los comités, y evaluar el programa de manera periódica.