El biológico anticovid Patria “es un paraguas para apoyo a varios proyectos fundamentales de desarrollo de vacunas” en el país, aseguró María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), quien indicó que el estudio avanza a sus últimas etapas.
“Va muy bien, y quiero adelantarles que estamos por lanzar un ensayo, la siguiente fase. Ésta es una primicia. La siguiente fase va a ser un brazo paralelo a la terminación del R-2 (fase 2 de refuerzo), para poder dar acceso a un número mayor de personas que tengan ya el refuerzo administrado hace cuatro meses o más, a fin de poder participar en la última fase de Patria.
“A través de ustedes (los medios) quiero invitar a que estén muy atentas y atentos mis compatriotas, porque este proyecto solamente va a salir si todos nos comprometemos, pero ya estamos muy cerquita de lanzar esta tercera fase”.
En entrevista, Álvarez-Buylla descartó dar una fecha tentativa en la que Patria pudiera comenzar a aplicarse en la población, y explicó que la llegada de la variante ómicron afectó el reclutamiento de voluntarios.
“Nosotros teníamos la tasa de reclutamiento exitoso antes de que llegara ómicron a nuestro país, una probabilidad de que de 100 personas que decidían firmar el consentimiento informado, teníamos una tasa de éxito de aproximadamente 50 a 60 por ciento, es decir, cinco o seis de cada 10 personas que decían ‘yo quiero ser voluntario de Patria’ podían pasar.
“Porque teníamos un límite de aceptación de anticuerpos, y solamente aquellos que tenían menos de mil 200 de respuesta de protección antigénica podían participar en Patria. Después de ómicron, esa tasa de éxito bajó a 10 o 15 por ciento”.
Esta situación “implica un retraso tremendo en el tiempo y un ajuste de los proyectos”; en suma, hubo que “adaptar los protocolos, y no me voy a aventurar a dar una fecha”.
No todo es dinero
Sobre la inversión en ciencia, tecnología e innovación, la titular del Conacyt precisó que “no todo es el dinero, es importante dejar de focalizar la perspectiva y la planeación estratégica de la ciencia, y de muchas actividades humanas en torno a los recursos”.
No obstante, estimó que, “obviamente, los recursos financieros son importantes, pero mucho más importante que solamente estar enfocados en uno o 2 por ciento (del PIB destinado a ciencia) es tener planes estratégicos para asegurar que el avance científico siga su curso ascendente”.
Aseveró que “un reto que tenemos antes del uno por ciento, es que los grandes talentos no se sigan yendo de nuestro país. Estamos por publicar un libro de la migración altamente calificada, que muestra este gran rezago que tenemos”. Eso “es el resultado del neoliberalismo y de estarse enfocando en parámetros que no son los significativos”.