Moscú. El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó ayer que Occidente sufre más que Rusia por las sanciones impuestas a Moscú por la ofensiva en Ucrania, y dijo que la economía de su nación es resistente a los “desafíos externos”.
Los que impusieron sanciones, “guiados por sus infladas y ciegas ambiciones y su rusofobia, están asestando un golpe mucho más duro a sus propios intereses nacionales, economías y a la prosperidad de sus ciudadanos”, señaló Putin durante una reunión de temas económicos.
“Lo vemos, sobre todo, al observar el fuerte aumento de la inflación en Europa, que se acerca a 20 por ciento en algunos países”, y agregó: “es evidente que la continuación de la obsesión por las penalizaciones conducirá inevitablemente a las más difíciles consecuencias para la Unión Europea y sus ciudadanos”.
“En tanto, Rusia afronta con confianza los desafíos externos gracias a su responsable política macroeconómica de los recientes años, así como a las decisiones sistémicas encaminadas a reforzar su soberanía económica y su seguridad tecnológica y alimentaria.”
Se congratuló de la desaceleración “gradual” de la inflación después de que se disparó hasta 16.7 por ciento en marzo, así como del fortalecimiento del rublo.
Los países occidentales impusieron sanciones económicas sin precedente a Rusia tras el inicio de su ofensiva en Ucrania el 24 de febrero.
Mientras, el ejército ruso continúa su ofensiva en la región del Donbás, ganando terreno con intensos combates en la región de Lugansk, donde, según la presidencia ucrania, intentan tomar “el control total” de las ciudades de Rubizhne y Severodonetsk. Los habitantes, que rechazan la evacuación, son en muchos casos favorables a Moscú.
“Están dando a los rusos nuestras coordenadas, eso es seguro”, señaló a la Afp un soldado que utiliza el nombre de guerra Zastava en la línea del frente en Novomykolayvka.
El gobernador de la región rusa de Belgorod, fronteriza con Ucrania en el suroeste de Rusia, declaró que los bombardeos lanzados antier por las fuerzas de Ucrania dejaron un muerto y seis heridos.
Al tiempo que ataques aéreos rusos mataron al menos a tres personas e hirieron a otras 12 cerca de Chernígov (noreste) en un ataque contra una escuela en Novgorod-Siversky, según los servicios de rescate. El mandatario regional, Vyacheslav Tchaus, sostuvo que “las infraestructuras críticas, incluidas las escuelas”, fueron afectadas.
El Comando Operativo Norte confirmó el ataque en Facebook: “En las primeras horas del día, tropas rusas dispararon numerosos cohetes contra una escuela y un complejo residencial para estudiantes en la ciudad de Novgorod-Siversky”. Añadió que inmuebles contiguos de oficinas administrativas, dormitorios y residencias privadas sufrieron daños.
Golpes estratégicos
Entre ocho y 12 misiles del país atacante cayeron en la refinería de crudo y otras instalaciones en el eje industrial ucranio de Kremenchuk, informó el mandatario interino de la región central de Poltava.
En ese contexto, Ucrania acusó a Rusia de robar el grano del país y de intentar vender parte del mismo en los mercados mundiales, y reiteró su acusación de que El Kremlin emplea bombas de racimo y municiones de fósforo, ambas prohibidas por organismos internacionales, en la región ucrania de Krivói Rog.