Ciudad de México. Al persistir los elevados niveles de inflación, el Banco de México (BdeM) incrementó su tasa de interés de referencia –la que determina el costo del crédito al que se financian empresas y personas– en medio punto porcentual para colocarla en 7 por ciento.
“Ante presiones inflacionarias mayores a las anticipadas… la Junta de Gobierno decidió por mayoría incrementar en medio punto porcentual el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 7 por ciento”, señaló en su comunicado.
La decisión fue dividida en la Junta de Gobierno. Votaron a favor la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y los subgobernadores Galia Borja Gómez, Gerardo Esquivel Hernández y Jonathan Heath. En tanto, votó a favor de incrementar en 75 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 7.25 por ciento la subgobernadora Irene Espinosa Cantellano.
Se trata del octavo incremento consecutivo (los cuatro últimos de medio punto porcentual y los demás de un cuarto) desde junio de 2021, cuando comenzó su ciclo de endurecimiento de política monetaria a causa del aumento en el índice de precios.
El banco central enfatizó que los pronósticos de las inflaciones general y subyacente se revisaron al alza hasta el segundo y tercer trimestre de 2023, respectivamente, aunque se sigue previendo que la convergencia a la meta de 3 por ciento se alcance en el primer trimestre de 2024.
No obstante, apuntó, que las previsiones están sujetas a riesgos al alza en caso de persistir la inflación subyacente en niveles elevados, presiones inflacionarias externas derivadas de la pandemia, mayores presiones en los precios agropecuarios y energéticos por el conflicto geopolítico, depreciación cambiaria y presiones de costos.
En tanto, factores que pueden llevar las perspectivas a la baja son una disminución en la intensidad del conflicto bélico en Ucrania, mejor funcionamiento de las cadenas de suministro, un efecto mayor al esperado de la brecha negativa del producto o un efecto mayor al esperado del Paquete Contra la Inflación y la Carestía.
No obstante, el BdeM advirtió que el balance de riesgos respecto a la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza y se ha continuado deteriorando.
Enfatizó en que en las próximas decisiones la Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas.