La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) se ha ido transformando en una institución manejada por los mismos consumidores, al grado que, mientras en otras administraciones su objetivo era “fastidiar” a las empresas, ahora es una herramienta para proteger los derechos de todo el que adquiere un bien o servicio en México, aseguró el titular Ricardo Sheffield Padilla.
En entrevista, el funcionario enfatizó que en los tres años de la actual administración la Profeco se ha convertido en un organismo que “regula la microeconomía” del país, es decir, la que está directamente relacionada con las familias, pues cada vez son más los consumidores que conocen sus derechos y la labor de la Profeco, incrementando así su fuerza para evitar alzas injustificadas en los precios.
En los próximos meses, aseguró Sheffield Padilla, la principal labor de la Profeco será verificar que se cumpla el pacto presentado por el gobierno federal y la iniciativa privada para reducir la inflación que azota al país, para esto, la procuraduría llevará a cabo supervisiones de campo, al tiempo que estará abierta a recibir quejas y denuncias por parte de los consumidores. “Cada vez son más los millones de mexicanos empoderados, más los que conocen sobre la Profeco y los derechos que tienen. Paulatinamente nos hemos convertido en un regulador de mercado gracias a la fuerza que ahora tienen los consumidores, la cual es tal que la procuraduría ya es un organismo que regula la microeconomía, pero por medio de los consumidores, pues son estos mismos los que van moldeando el mercado”, afirmó.
Sólo en 2021, de acuerdo con datos de la misma Profeco, se aplicaron multas por alrededor de 120 millones de pesos, las cuales fueron aplicadas a empresas como Walmart, Viva Aerobús, Fresh Cash, Gayoso, entre muchas otras, las cuales incumplieron de alguna u otra forma con lo prometido a los consumidores.
Ojo especial al acaparamiento
El titular de la Profeco resaltó que la institución estará atenta a que se cumpla con lo pactado en el plan contra la inflación, haciendo especial énfasis en cuestiones de acaparamiento, pues si bien hasta el momento no se ha registrado ningún caso en ninguna actividad productiva, es fundamental prestar atención, pues es un delito que lastra la economía y por lo tanto se puede castigar hasta con cárcel.
Otro punto en el que habrá mucha atención es en la inflación simulada o aumento injustificado de precios, de modo que el precio de los productos únicamente suba lo establecido por el mercado y no que sirva como un pretexto para abusar del consumidor. “La gente debe saber que tal producto subió 3 por ciento y no 10, si las personas identifican esos casos no deben consumir y pueden levantar una queja”.
Sheffield Padilla indicó que la encomienda del presidente Andrés Manuel López Obrador es que la Profeco supervise los precios de los 24 productos básicos que entraron en el pacto con la iniciativa privada, pero también estará atento en otros rubros fundamentales para las familias mexicanas, como las remesas, el gas doméstico, y las gasolinas.
En este último sector, gasolineros del estado de México denunciaron hace algunos días supuestas extorsiones por parte de algunos agentes de la Profeco, lo que llevó a la Secretaría de Gobernación a anunciar la destitución de tres servidores públicos de la procuraduría, justamente del área de combustibles, para posteriormente nombrar a nuevos.
Sobre este tema el titular de la Profeco se negó a abundar, argumentando que su postura la había dado hace unos días en su cuenta de Twitter. En ella, el procurador señaló: “Ninguna irregularidad hay en Profeco. Ni causa, ni proceso. Hoy estuve con el señor Presidente, y ni hoy, ni ningún otro día me ha preguntado o informado de alguna irregularidad. No he firmado nombramientos, no les veo sustento”. Cabe apuntar que posteriormente firmó los nombramientos.