Ciudad de México. En 2021 más de la mitad de la población adulta se vio afectada económicamente como resultado de los efectos de la pandemia de covid-19, reveló la Encuesta Nacional de Educación Financiera (ENIF).
“El 56 por ciento de la población adulta reportó haber sufrido afectaciones económicas derivadas de la pandemia de covid-19. Estas afectaciones fueron heterogéneas a lo largo del país, ya que la población en la región norte del país las experimentó en menor medida que la población en las regiones del sur y centro”.
De acuerdo con la encuesta, realizada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la población en localidades rurales experimentó un nivel de afectación similar a la de las zonas urbanas, excepto en la región norte del país donde fue menor en las primeras.
Según el documento, ante dichos impactos, la población afectada se vio obligada a recurrir a diversas medidas para enfrentar el choque económico y casi la totalidad de personas que sufrió alguna clase de afectación económica reportó haber reducido sus gastos para enfrentarla.
“Alrededor de 8 de cada 10 personas afectadas recurrió a sus ahorros y solo 4 de cada 10 reportó haber recurrido a préstamos de familiares. Esto sugiere que parte importante de la población vio reducido su nivel de bienestar al tener que limitarse en su consumo y reducir sus ahorros, además que posiblemente sus redes familiares de soporte se vieron también afectadas, lo que pudo haber generado una situación de mayor vulnerabilidad financiera”, expuso.
Señaló que entre la población afectada que contaba con crédito formal, solo 30 por ciento reportó haber utilizado una tarjeta de crédito o haber solicitado algún tipo de financiamiento para enfrentar el choque de la crisis.
“Esto sugiere que, incluso entre la población ya incluida en el mercado crediticio formal, el crédito no parece ser la primera opción para enfrentar una emergencia económica”, puntualizó la encuesta.
Apuntó que cerca de 28 por ciento de las personas con crédito formal afectadas reportaron haberse retrasado en el pago de algún crédito, lo que podría haber intensificado su vulnerabilidad económica; mientras que cerca de 1 de cada 4 acreditados afectados reportó haber aceptado la prórroga de pago de intereses por parte de una institución financiera, por lo que una parte importante de la población pudo haberse beneficiado por estas facilidades otorgadas por las instituciones financieras.
Cabe recordar que al inicio de la crisis sanitaria las autoridades, junto con las instituciones de crédito, presentaron un programa de apoyo a deudores el cual consistió en aplazar de 4 a 6 meses el pago de créditos sin el cobro de intereses extraordinarios ni reporte a las sociedades de información crediticia.
Así, según la encuesta, para enfrentar la crisis 95 por ciento de las personas encuestadas redujeron gastos como medida para enfrentar el choque, 79 por ciento recurrió a sus ahorros, 40 por ciento tuvo préstamos familiares y 18 por ciento empeñó o vendió algunas de sus pertenencias.