Ciudad de México. Luz Alicia Gordoa y Julissa Iriarte, ambas ampáyeres en la Liga Mexicana de Beisbol, comparten sus experiencias en la innovadora misión de ser madres a la vez que imparten justicia en los diamantes, terrenos en los que aspiran a ser ejemplares, tanto en los partidos como ante sus hijas y otras mujeres.
“Es parecido, porque tienes que comportarte bien. Con mi hija debo ser firme y llevarla de la mano, igual que como ampáyer, que debes actuar con firmeza y decisión”, señaló Gordoa, en declaraciones al sitio de la Liga Mexicana de Beisbol.
“Ser madre es una gran responsabilidad”, anotó Gordoa, cuya hija es mayor de edad y se prepara para ser sobrecargo.
Gordoa e Iriarte, ambas sinaloenses, no son las primeras mujeres que se desempeñan en el máximo circuito de beisbol cantando bolas y strikes. Sus antecesoras fueron Ana Laura Larrazolo y Virginia Ponce, quienes fueron incluidas por primera vez en un juego oficial de la LMB en el Parque Fray Nano de la Ciudad de México en 1980, durante el efímero proyecto en la liga de la ANABE.
Alicia Gordoa se convirtió en la primera ampáyer dentro de la Liga Mexicana después de 38 años, cuando debutó el 15 de mayo de 2018 en el mismo Fray Nano, juego en el que los Diablos Rojos del México recibieron a los Guerreros de Oaxaca.
Alicia se desempeñó durante toda la temporada en la LMB en 2019, antes de tomarse una licencia y regresar para esta campaña, dentro de la Liga del Norte de México, en la que debutó el pasado 6 de mayo en el juego entre Freseros de San Quintín y Delfines de la Paz, haciendo la cuarteta para vigilar las jugadas con Julissa Iriarte, Eliseo Favela y Jesús Córdova.
Luis Alberto Ramírez, director de ampáyeres de la LMB, afirma que ambas “están preparadas y tienen facultades”.
Gordoa se entusiasma ante la idea de que más mujeres traba-jen para ser ampáyeres profesionales, y las motiva a desarrollarse en la LMB.
“Apoyarnos entre todas”
“Es una satisfacción enorme para mí, porque somos mujeres y tenemos que apoyarnos entre todas. Que se animen, es un buen trabajo y espero en un tiempo no muy lejano tengamos por lo menos una cuarteta de mujeres. No importa si son solteras, casadas, mamás. Se debe luchar por nuestros sueños”, resaltó.
Julissa Iriarte es una de esas mujeres que siguen los pasos de Luz Alicia. Se inició en el terreno profesional en la pretemporada de 2020, en 2021 tuvo oportunidad de estar en juegos de la Liga Invernal Mexicana, y en este 2022 ya había estado detrás del plato en juegos de pretemporada del máximo circuito.
Ya no es una novata, pero tampoco lo es como madre, aunque no es fácil separarse de su hija de cinco años cada vez que tiene que desplazarse a los estadios, por ahora en el norte del país.
“A veces me dice: ‘mamá no te vayas’, pero yo le echo muchísimas ganas para dar lo mejor” dijo, y afirma que trabaja para darle lo mejor a su hija. A pesar de la distancia y de la corta edad de su niña, Nohelly comprende finalmente que su madre a veces tiene que estar lejos. “Trabajo para brindarle un mejor futuro”, compartió Julissa.
“Voy a trabajar súper fuerte y seguiré preparándome. Estoy enfocada en lo que estoy haciendo”, dijo Julissa, y destacó que siempre estará dispuesta como su colega pionera en la LMB para cualquier situación, trabajar en equipo, en pareja, tercia o cuarteta.