La práctica de los “tapados” responde a una situación anacrónica propia del porfiriato y que no se debe repetir, reiteró ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador al advertir, además, que “hay también que autolimitarnos todos”, porque no se trata de buscar una candidatura para que quede el registro en el currículum, pues al final de cuentas, dijo, es una actitud como de “paleros”.
En su conferencia matutina en Palacio Nacional, el mandatario fue interrogado sobre un supuesto grupo de empresarios que buscan formar un frente opositor y eventualmente ser candidatos rumbo a las elecciones de 2024.
Al respecto, ponderó que “legalmente todos los mexicanos tenemos derecho a votar y ser votados, todos podemos aspirar a un cargo de representación popular, es completamente legal; inclusive, no sólo a través de partidos, sino de manera independiente. Es legal”.
Descartó que ello pueda generar polarización en el país porque “el pueblo de México es mayor de edad, ya no se le puede ver al ciudadano como un ciudadano manipulable”.
Enseguida, el tabasqueño insistió que la política del “tapado” es anacrónica y viene acompañada de una “faramalla” en la que “un sector va y destapa, porque este personaje es amigo de los obreros o es amigo de los campesinos. Y, luego, la cargada, esto hasta hace poco. ¡Cómo vamos a seguir con ese anacronismo! No, libertad, que todos puedan participar, todos los que tengan posibilidad”, concluyó.