Beirut. El número de niños que necesitan ayuda en Siria desde que estalló la guerra, hace más de una década, alcanzó una cifra récord, aseguró ayer el Fondo de Naciones para la Infancia (Unicef), al advertir que los fondos “están disminuyendo”, mientras el presidente sirio, Bashar al Assad, se reunió en Teherán con el líder supremo de Irán, el ayatola Alí Jamenei, y con el presidente Ebrahim Raisi
“Los niños de Siria han sufrido por mucho tiempo y esto debe parar”, señaló el Unicef.
En total 9.3 millones de niños sirios necesitan ayuda tanto dentro del país como en las regiones a las que han huido, declaró a la agencia Afp Juliette Touma, portavoz de Unicef.
“Más de 6.5 millones de niños en Siria necesitan asistencia, la cifra más alta registrada desde el comienzo de la crisis, hace más de 11 años”, añadió el organismo.
En los países vecinos, 2.8 millones de niños sirios refugiados dependen de la asistencia, detalló Touma.
La guerra de Siria ha matado a cerca de medio millón de personas, según las estimaciones, y millones han tenido que desplazarse desde que comenzó el conflicto con la brutal represión de las protestas antigubernamentales en 2011.
“Las necesidades de los niños, tanto dentro de Siria como en los países vecinos son cada vez mayores”, sostuvo Adele Khodr, jefa del Unicef para Medio Oriente.
“Muchas familias tienen dificultades para llegar a fin de mes. Los precios de los productos básicos se están disparando, en parte como resultado de la crisis en Ucrania”, explicó.
Los menores se encuentran entre los más vulnerables a la guerra y el Unicef advirtió que están soportando la peor parte del impacto.
“El financiamiento de las operaciones humanitarias disminuye rápidamente”, dijo Khodr, y aseguró que el “Unicef ha recibido menos de la mitad de los recursos para cubrir sus necesidades de este año”.
En tanto, Al Assad se reunió con dirigentes iraníes en Teherán en su segundo viaje a Irán, su principal aliado en el combate, desde que estalló la guerra civil.
Nour News, sitio web cercano al Consejo Superior de Seguridad Nacional de Irán, reportó que Assad se reunió con el líder supremo Jamenei, y con el presidente Ebrahim Raisi. Añadió que los líderes elogiaron los fuertes vínculos entre sus naciones y se comprometieron a impulsar aún más la relación. Se informó que Al Assad salió de Teherán rumbo a Damasco ayer.
“Todo el mundo mira ahora a Siria como una potencia”, expuso Jamenei a Al Assad en la reunión, según la agencia de noticias semioficial iraní Tasnim.
Al Assad, por su parte, dijo que la sólida relación bilateral servía de baluarte contra la influencia de Israel en Medio Oriente.