Pese a que aún existen muchos tabúes, mitos y miedos sobre la medicina cannábica, es un auxiliar en el tratamiento de diversos padecimientos y condiciones, entre ellos la artritis reumatoide, migraña, estrés, autismo y epilepsia, aseguró la médica Mirna Flores Meza, presidenta de la Academia Mexicana de Medicina Cannábica (Amedcann).
Al anunciar el Primer Congreso Internacional de Endocannabinología y Medicina Regenerativa para Médicos y Profesionales de la Salud, el cual reunirá a más de 20 especialistas de México, Colombia, Panamá y Estados Unidos, aseguró que cada vez más especialistas se interesan en esta disciplina y llamó a “romper tabúes” relacionados, por ejemplo, con la posibilidad de volverse dependiente de estas sustancias.
Expuso que en el encuentro (19 y 20 de mayo en el Palacio de Escuela de Medicina de la UNAM en el Centro Histórico) se evidenciará que la “medicina cannábica es coadyuvante, es ancestral, propicia un buen funcionamiento del cuerpo y hace que éste regule sus funciones”.
La intención, explicó, es que se haga “uso profesional de la medicina cannábica” y aseveró que el encuentro cuenta con el “aval de la escuela medicina del Instituto Politécnico Nacional (IPN)”. De hecho, uno de los ponentes será el doctor Salvador Lara Franco, director de la Escuela Superior e Medicina del este instituto.
El especialista abordará las perspectivas de la medicina cannábica en México, la inmunopatología del covid-19, el uso de fitocannabinoides, los avances en el desarrollo de nuevas cepas de cannabis, y su importancia en el sector médico y el efecto neuroprotector de los cannabinoides en las enfermedades neurodegenerativas.
Flores Meza explicó que el sistema endocannabinoide tiene receptores y que es así como funcionan las sustancias cannábicas, y lo ejemplificó con las personas que padecen artritis: “En las articulaciones tenemos receptores para que entre la medicina cannábica; va directamente a las articulaciones, se deja de sentir dolor y aumenta la movilidad, además de ayudar a disminuir la depresión en los pacientes reumáticos”.
Insistió en la urgencia de derribar “mitos” respecto a que con el uso de la medicina cannábica alguien pueda volverse adicto y criticó la criminalización que se hace a quienes consumen estas sustancias.
Destacó que la planta posee flavonoides, sustancias con propiedades desinflamatorias y que el CBG o cannabigerol, que no tiene propiedades sicoactivas, ayuda a reducir la presión interocular que genera el glaucoma, mientras el cannabinoide CBN adyuda a conciliar el sueño.
La medicina cannábica puede tratar “la epilepsia, enfermedades metabólicas como hipertensión y diabetes, así como la enfermedad de Crohn (un padecimiento autoinmune), el autismo, la ansiedad y padecimientos ginecológicos como endometriosis. También existen nutriólogas cannábicas, sicólogas cannábicas y cardiólogos cannábicos”.