Bogotá. El presidente de Colombia, Iván Duque, anunció este sábado la creación de un bloque de búsqueda y una recompensa de más de 1 millón de dólares para capturar a los guerrilleros alias Siopas y Chiquito Malo, nuevos líderes del Clan del Golfo, la principal banda criminal del país.

"Se creará el grupo de búsqueda especial, incluso más fuerte que el que se creó para ir detrás del Cártel de Cali. Todas las fuerzas estarán integradas con los hombres especializados para dar con los cabecillas de esta organización", dijo el mandatario en conferencia de prensa tras analizar el paro armado decretado por el grupo armado después de la extradición de su anterior líder, Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, hacia Estados Unidos y que ha desatado una ola de violencia en al menos siete departamentos del país.

En ese sentido, el mandatario anunció la mayor movilización de tropas en los puntos críticos afectados. "Estamos hablando de más de 52 mil hombres que estarán encaminados a devolver la tranquilidad a donde quieren generar afectaciones. También, habrá presencia del Gaula [el cuerpo antisecuestro y antiextorsión de la Policía colombiana] para evitar cualquier tipo de extorsión e intimidación", añadió.

Acerca del inicio del paro armado, que dejó un saldo de al menos 100 vehículos incinerados entre camiones, automóviles y motocicletas, Duque aseguró que el grupo criminal ha "tratado de generar intimidación a través de actos aislados y cobardes que buscan tener maximización a través de redes sociales y medios de comunicación".

"Nuestro gobierno le ha asestado al Clan del Golfo los golpes más duros desde que existe esa estructura. Y quizás el punto más claro del triunfo de la legalidad sobre esa organización criminal fue la captura y la extradición de Otoniel", declaró el mandatario.

El 8 de abril, el jefe de Estado firmó la extradición del guerrillero y calificó el suceso como "una respuesta adicional de la institucionalidad". El miércoles 4 de mayo, las autoridades colombianas dieron luz verde a su traslado a Estados Unidos., país que lo acusa de delitos de tráfico de drogas y de ser "uno de los capos más peligrosos del mundo".