San Cristóbal de Las Casas, Chis., Familiares de migrantes centroamericanos desaparecidos en México colocaron una ofrenda floral ayer y rindieron un homenaje a los 56 extranjeros que murieron el 9 de diciembre pasado al accidentarse el camión en el que viajaban, a la altura de la colonia El Refugio, municipio de Chiapa de Corzo.
Los 47 integrantes de la caravana arribaron ayer al sitio del percance y depositaron flores en la pequeña capilla para recordarlos. De los extranjeros que fallecieron 40 eran de Guatemala, 13 de República Dominicana, uno de El Salvador y uno de Ecuador.
“Esto es un acto en memoria de los que quedaron aquí muertos en el accidente. Que su sangre sea esa semilla que germine para la exigencia de los derechos de las poblaciones migrantes”, dijo Catalina López, representante de Equipos de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial de Guatemala.
“Abajo las fronteras, no más persecución, porque todos tenemos derecho a migrar por la violencia estructural que existe en nuestros países. Los mismos gobiernos aplican políticas que generan y expulsan a las personas de sus países de origen; especialmente la población indígena es la que está sufriendo en este momento porque hay muchos desalojos e invasión por megaproyectos en nuestras naciones. Por eso gritamos abajo las fronteras”, aseveró.
“No somos criminales”
“Dónde están, dónde están nuestros hijos, dónde están”, “los migrantes no somos criminales, somos trabajadores internacionales” y “queremos justicia”, corearon los integrantes de la caravana que el primero de mayo ingresó a México para recorrer Chiapas, Tabasco, Veracruz y la Ciudad de México, a fin de buscar a los migrantes desaparecidos.
Junto a la capilla y a los murales que recrean el accidente y la muerte de los 56 migrantes, Thalía Vázquez Alatorre, presidenta del Movimiento Migrante Mesoamericano, organizador del periplo que durará 10 días, dijo que “los migrantes son los más vulnerables y nadie los busca, hasta para el tráfico de órganos los desaparecen porque son fuertes”.