A 16 años del operativo policial del 3 y 4 de mayo de 2006 en Texcoco y San Salvador Atenco, estado de México, que desembocó en la tortura sexual de varias mujeres, las víctimas denunciaron que a la fecha siguen sin obtener justicia. Afirmaron que la investigación continúa fragmentada, una parte de ella con la autoridad federal y otra en la fiscalía del estado de México; en esta última no existe ninguna sentencia condenatoria y la Fiscalía General de la República (FGR) no avanza en el castigo a los altos mandos que ordenaron el operativo.
También acusaron que a tres años de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coridh), de las nueve medidas establecidas sólo dos se han cumplido: la publicación de la sentencia y las indemnizaciones económicas.
En tanto, integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) demandaron al gobierno federal cumpla con llevar a tribunales a los autores intelectuales, entre ellos al ex presidente Enrique Peña Nieto, por las agresiones sexuales contra las mujeres y los asesinatos de los jóvenes Alexis Benhumea y Javier Cortés.
Ivette Galván, abogada del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, expuso que tener una investigación fragmentada sobre los casos de tortura sexual “es un incumplimiento, porque la misma Corte ordena y declara que la indagatoria realizada por el estado de México es deficiente. Entonces, ordena hacer una investigación exhaustiva, sistemática, completa y con perspectiva de género, que es precisamente por lo que se inicia una averiguación previa en la FGR”.
Norma Jiménez, una de las 11 víctimas que denunciaron el caso ante la Coridh, afirmó que el costo para acceder a la justicia ha sido “muy caro en cuanto a salud emocional, esfuerzo”, al ser un proceso “de muchísima impunidad y estigmatización”.
Señaló que en el gobierno federal “sigue sin haber esa voluntad de parte de algunas autoridades” para atender a cabalidad las medidas de la Coridh, entre ellas, la investigación y sanción a todos los elementos estatales y federales, crear un observatorio independiente sobre uso de la fuerza de las instituciones policiales a nivel federal y del estado de México, así como fortalecer el Mecanismo de Seguimiento de Casos de Tortura Sexual Cometida en contra de Mujeres.
Por otra parte, al conmemorar 16 años de los hechos, el líder del FPDT, Ignacio del Valle, aseveró: “aquí no hay ni perdón ni olvido, nuestra exigencia de castigo seguirá”.
(Con información de Javier Salinas Cesáreo, corresponsal)