A pesar de la política de austeridad, el Congreso de la Unión y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) gastaron 14 mil 816 millones de pesos en 2021, esto es 164.8 millones más a lo autorizado en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
Según la cuenta pública de ese año, si bien hubo recortes en algunas áreas, se disparó el gasto en subvenciones a los grupos parlamentarios y a salarios de personal transitorio.
El informe, que fue enviado el viernes a la Cámara de Diputados, y que presenta la información del ejercicio del gasto en ese año, detalla que el monto aprobado para las dos cámaras y las ASF ascendió a 14 mil 816 millones 605 mil 390 pesos.
No obstante, al cierre del ejercicio el monto se elevó a 14 mil 981 millones 430 mil 083.
Entre las reducciones de gasto de las dos cámaras y de la ASF se encuentran rubros como pago de estímulos a funcionarios, gastos de operación, viáticos y servicios generales.
En contraste, otros objetos del gasto se incrementaron. Así, por ejemplo, los subsidios y subvenciones estaban previstos en mil 29 millones 865 mil pesos, pero terminaron en mil 328 millones 826 mil 901 pesos.
Si bien se mantuvo sin cambios el monto de recursos para el capítulo 1000, de salarios, en el Senado el destinado a personal transitorio se elevó, al pasar de 750 millones previsto para 2021 a 936 millones 579 mil 507.
El mayor crecimiento se dio, en la ASF –encargada de fiscalizar el gasto público–, que tenía autorizado sólo 48 millones 759 mil 888 pesos para el rubro de personal transitorio.
Al final de 2021 el monto devengado fue de 341 millones 96 mil 679 pesos, esto es 292 millones 336 mil 791 pesos más.
La Cámara de Diputados tenía previsto destinar mil 18 millones 822 mil 135 pesos para el pago de personal con carácter transitorio, y finalmente ejerció mil 9 millones 489 mil 972 pesos.