El gobierno federal tiene la determinación de mantener “por el tiempo que sea necesario” subsidios para evitar variaciones bruscas en el precio de las gasolinas, una medida que hasta ahora ha permitido contener la inflación y preservar el poder adquisitivo de las familias.
“Con los incentivos adicionales que se han activado en complementariedad con el incentivo del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS), prácticamente se están evitando cerca de dos puntos porcentuales de inflación acumulado en cuatro meses desde que se inició la medida”, dijo Gabriel Yorio González, subsecretario de Hacienda.
La dependencia apuntó que así se está “protegiendo el poder adquisitivo de los mexicanos”.
En el primer trimestre el gobierno federal recaudó 20 mil 783 millones por IEPS, monto que significó una diferencia de 43 mil 462 millones de pesos, respecto a lo programado, que era 64 mil 246 millones de pesos.
En días recientes, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) señaló que los subsidios a las gasolinas para este año pueden alcanzar los 330 mil millones de pesos.
Los ingresos del sector público en el primer trimestre sumaron un billón 715 mil millones de pesos, monto superior en 20 mil 700 millones de pesos respecto a los programado y mayores en 2.2 por ciento real respecto a igual periodo del año pasado.
Hacienda señaló que el resultado se obtuvo gracias a una eficiencia recaudatoria y a una mayor entrada de recursos por el aumento en los precios internacionales del crudo.
Apuntó que los ingresos no observaron una afectación por los apoyos que la actual administración ha activado para estabilizar el costo de los combustibles automotores. “Esto va a tener un impacto neutral en las finanzas públicas, no va a tener efectos de recortes presupuestales o recorte del gasto”, dijo Yorio Gonzalez.
Los ingresos petroleros ascendieron a 289 mil 253 millones de pesos, dato que fue superior en 31.7 por ciento real respecto a igual periodo del año pasado y repuntaron 3 mil 382 millones de pesos frente a lo programado.
Los ingresos no petroleros observaron un descenso de 2.2 por ciento en términos reales en el lapso de referencia, luego de que se ubicaron en un billón 426 mil millones de pesos, pese a ello, fueron superiores en 17 mil 318 millones de pesos frente a lo programado.
La captación de ingresos tributarios, que son los que reflejan la actividad económica, fueron de un billón 119 mil millones de pesos, monto 2 mil 721 millones de pesos inferior a lo estimado, pero 1.9 por ciento mayor respecto a enero-marzo de 2021.
En particular, la recaudación por el impuesto al valor agregado (IVA), fue de 702 mil 314 millones de pesos, cifra que se tradujo en un descenso de 9.3 por ciento real frente a igual periodo del año pasado, aunque la captación fue 37 mil 979 millones menor a lo programado.
La tributación del impuesto sobre la renta ascendió a 702 mil 314 millones de pesos, monto 13.5 por ciento real mayor en comparación con enero-marzo de 2021 y superior en 63 mil 625 millones respecto de lo esperado.
El gasto total del sector público fue de un billón 799 mil millones de pesos, dato que representó un ligero crecimiento de 0.8 por ciento frente a igual periodo del año pasado.
Baja la deuda a 45.4% del PIB
La dependencia federal destacó que la deuda pública continúa con una trayectoria sostenible, pues se ubicó en 45.4 por ciento como proporción del producto interno bruto (PIB), 4.6 puntos porcentuales menor respecto al cierre de 2021.
El saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público se ubicó en el primer trimestre del año en 13 billones 123 mil millones de pesos.