El llamado clásico joven entre América y Cruz Azul, este sábado en la última fecha de la fase regular del torneo Clausura 2022, será de gran importancia para ambos equi-pos en sus aspiraciones de conseguir el boleto directo a la liguilla, pero también será una oportunidad inmejorable para que las Águilas finalmente derroten a La Máquina, equipo al que no han podido vencer desde hace tres años.
El más reciente triunfo de los azulcremas sobre los celestes fue el 9 de mayo de 2019, cuando ganaron 3-1 en el duelo de ida de los cuartos de final del torneo Clausura de ese año. Desde entonces, se han enfrentado seis ocasiones más, donde los cementeros salieron victorio-sos en cuatro partidos, mientras en los otros dos empataron.
Para poder romper esta racha negativa, el América deberá aprovechar el repunte que ha tenido en sus más recientes partidos bajo el mando del técnico interino Fernando Ortiz, tras la salida del argentino Santiago Solari, así como la baja de juego de los celestes.
Hasta el momento, los americanistas ocupan el quinto lugar de la clasificación general, con 25 puntos, mientras los cementeros se ubican en el sexto, con 24, por lo que el triunfo impulsaría a cualquiera de las dos escuadras hasta las primeras posiciones para obtener el pase directo a la llamada “fiesta grande”.
Aunque también dependen de los resultados que consigan en sus respectivos partidos Puebla y Atlas, los cuales están empatados con 26 unidades y marchan momentáneamente en la tercera y cuarta posición.
Los únicos equipos que ya tienen asegurado su boleto directo a la liguilla son el líder Pachuca, que suma 38 puntos, y Tigres, segundos con 32 unidades.
En conferencia virtual realizada ayer, el americanista Federico Viñas aseguró que su equipo está obligado a ganarle a Cruz Azul no sólo para avanzar directamente a los cuartos de final, sino también porque se trata de un clásico.
“Es un duelo vital en el que necesitamos ganar los tres puntos para poder clasificar directo, pero también es un clásico y será un juego duro, trataremos de hacer un buen partido.
“Los clásicos se ganan sin importar los resultados que ambos hayamos tenido anteriormente, también es una motivación extra para ellos, nosotros no vemos la tabla, sólo vamos al partido para imponernos como el equipo grande que somos”, aseveró.
Asimismo, el uruguayo reconoció que bajo el mando de Fernando Ortiz, tanto él como su equipo han recuperado la confianza.
“Es muy unido al grupo, siempre se acerca a los compañeros para aconsejarles, y eso es muy bueno. En lo personal me ha dado mucha confianza, no ha caído el gol como quisiéramos, pero hemos hecho buenos partidos, me he sentido muy bien en lo físico y lo mental, y eso es muy importante para un jugador estar bien con uno mismo, tenerse fe, y eso es en gran parte por el entrenador”, mencionó.