El Banco de México (BdeM) no dará por segundo año consecutivo remanentes o utilidades al gobierno federal, pues registró una pérdida por 743 millones de pesos, la cual será amortizada contra cuentas de capital.
“El resultado del ejercicio 2021 correspondió a una pérdida de 743 millones de pesos, por lo que no existieron recursos para constituir reservas de capital ni resultó remanente de operación a entregar al gobierno federal en términos del artículo 55 de la Ley del Banco de México”, señaló la institución en sus estados financieros dictaminados.
El banco central mexicano informó en un comunicado que ante el resultado reportado, las pérdidas serán amortizadas contra cuentas de capital.
Este es el segundo año consecutivo que el BdeM no entrega remanentes al gobierno federal, pues el año pasado indicó que durante el ejercicio de 2020 no había generado utilidades derivado de las fluctuaciones del tipo cambiario.
En abril de 2021, el banco central mexicano indicó que los estados financieros presentaban un resultado 165 mil 017 millones de pesos, de los cuales 121 mil 775 millones de pesos fueron asignados a la amortización de pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, mientras que los 43 mil 242 millones de pesos sirvieron para incrementar las reservas de capital.
Antes de conocerse el anuncio, Gabriel Yorio González, subsecretario de Hacienda comentó en conferencia que si el banco central no daba los remanentes, sería “una buena noticia, en el sentido de que cuando se generan remanentes, se generan sobre la base de las reservas internacionales del banco central, que es una base muchísimo menos a la base de deuda que tenemos. Ganamos más por mantener el tipo de cambio estable”.
“No se espera que recibamos remanentes y no es la expectativa del gobierno federal que existan remanentes o que se trasladen al presupuesto, inclusive el presupuesto no considera ninguna de estas líneas de fondeo y no esperamos que existan remanentes”, señaló.
“Los remanentes del banco central usualmente están ligados al nivel de depreciación que pueda sufrir la moneda en algún punto del año fiscal anterior al cierre del año fiscal. Actualmente la moneda mexicana es una de las monedas que más se ha mantenido estable de tal manera que la depreciación no se espera que genere remanentes”, dijo.