El nuevo documental de Netflix The Mystery of Marilyn Monroe: The Unheard Tapes descubre un nuevo detalle que desafía la historia aceptada sobre la muerte de la estrella.
La producción, según The Independent, combina imágenes de archivo y entrevistas con quienes conocieron a la estrella de Some Like It Hot y analiza las circunstancias que rodearon su muerte, en 1962, por una sobredosis de barbitúricos a la edad de 36 años.
Durante décadas, se informó que a Monroe la encontró muerta en su cama, su siquiatra Ralph Greenson, quien irrumpió por la ventana de su habitación después de que el ama de llaves, Eunice Murray, lo llamara angustiada, ya que no pudo entrar para ver cómo estaba ella.
Pero según el dueño de la compañía de ambulancias Walter Schaefer, quien es entrevistado en The Unheard Tapes, Monroe estaba viva cuando el conductor del vehículo, Ken Hunter, llegó para llevarla al hospital en Santa Mónica.
El escritor y periodista John Sherlock estuvo de acuerdo con el relato de Schaefer. Declaró que Greenson, el siquiatra, le dijo que estaba viva y que murió de camino al Centro de Salud de Saint John.
“Ella murió en la ambulancia”, comentó. “Luego la llevaron de regreso a la casa. (Greenson) me dijo que estaba en la ambulancia”.
Monroe fue famosa por sus papeles como personajes cómicos de “rubia tonta”, y fue uno de los símbolos sexuales más importantes de la década de 1950 y principios de la de 1960. Sus películas más exitosas incluyen The Seven Year Itch (1955), Bus Stop (1956) y Some Like It Hot (1959).
The Mystery of Marilyn Monroe: The Unheard Tapes ya está disponible en Netflix.