Con un beso en la mejilla y un abrazo, la diputada transgénero María Clemente García (Morena) y Gabriel Quadri de la Torre (PAN) anunciaron su reconciliación política.
Después de meses de confrontación verbal, ambos se presentaron a la sala de prensa de la Cámara de Diputados. Ahí, Quadri expuso que respaldará una iniciativa que Clemente García presentará para tipificar el delito de trans feminicidio en el Código Penal Federal.
Incluso, Quadri se dijo conmovido. “Espero que no se me quiebre la voz”, dijo respecto del fondo de la iniciativa y del acercamiento con la diputada, que incluso había solicitado juicio político.
En la sesión del 31 de marzo, el panista se dirigió como “el señor Luévano” a la otra diputada trans Salma Luévano, lo que derivó en un agrio intercambio e incluso la toma de la Mesa Directiva por parte de legisladoras de Morena.
Aquél día, Clemente García levantó de la curul de la presidencia a Santiago Creel Miranda.
Esta tarde, la diputada expuso: “Me he equivocado. La conducta tiene corrección”.
Quadri pidió un aplauso para ella y enseguida él también agregó: “También me he equivocado. Agradezco a la diputada este momento. Respeto a la comunidad LGBTI+. Cuenta conmigo y con mi apoyo. Te agradezco este gesto, histórico”.
Clemente García añadió que la violencia no puede provenir de nadie y definió la presentación pública junto a Quadri como un “acto de camaradería”.
—¿Amigos o solo camaradas? –se les preguntó.
—Por qué no. Espero que sí –dijo Quadri.