Con el aval de Morena y sus aliados y entre críticas y descalificaciones de la oposición, el Senado ratificó ayer el nombramiento presidencial de Carlos Miguel Aysa González como embajador de México ante República Dominicana.
La votación final fue 64 votos a favor, 44 en contra y dos abstenciones y de inmediato el ex gobernador de Campeche y nuevo diplomático rindió protesta y fue luego felicitado por senadores de Morena, PT, PVEM y PES. Los panistas y priístas que son parte de la mesa directiva bajaron del pleno, para no tener que toparse con él.
Durante hora y media los morenistas se confrontaron con los opositores, quienes insistieron en que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador usa “como moneda de cambio los nombramientos de embajadores” y los otorga a cambio de favores a quienes no tienen experiencia en el servicio exterior. El priísta Manuel Añorve advirtió que Aysa González entregó la gubernatura de Campeche e incluso su hijo votó a favor de la reforma eléctrica en la Cámara de Diputados. “Es una prostitución de la política exterior”, aseguró Germán Martínez.
El coordinador de Morena, Ricardo Monreal, resaltó que esas críticas y señalamientos “con tanta pasión”, sólo tenían una motivación política, “donde un partido se siente ofendido”, porque uno de sus militante aceptó un cargo, ya que Aysa González reúne los requisitos constitucionales y está en pleno goce de sus derechos políticos para representar a México en el extranjero.
Les recordó que de los 98 nombramientos de embajadores remitidos al Senado por el Ejecutivo federal, 80 por ciento fueron ratificados por unanimidad. De esa cifra, 66 son personal de carrera en el servicio exterior, 70 ciento.
Sin embargo, la panista Xóchitl Gálvez hasta vaticinó que seguramente “ya le están preparando espacios” a los gobernadores de Hidalgo y de Oaxaca, Omar Fayad y Alejandro Murat en alguna embajada. Lo que motivó la respuesta del senador de Morena, César Cravioto, en términos similares. Le dijo que de poco les servirá “seguir los berrinches de Alito”, quien está muy enojado porque Aysa González no operó en Campeche el fraude electoral que pretendía.
Incluso, Cravioto hizo un llamado a los gobernadores de las seis entidades en que habrá elecciones en junio próximo: “Compórtense bien, no metan las manos en el proceso electoral, hagan bien las cosas y tal vez reciban una invitación para que sean embajadores de nuestro país”.
Después de rendir protesta, el nuevo embajador ante República Dominicana salió del recinto, entre abrazos de la mayoría morenista y escoltado por el ex gobernador de Baja California Jaime Bonilla.
