Tras participar como observadores internacionales en la pasada consulta de revocación de mandato presidencial, integrantes de la organización canadiense Proyecto Delian señalaron que el proceso estuvo lleno de retórica y demagogia, además de introducir incertidumbre en los votantes.
Al presentar sus conclusiones en una conferencia de prensa organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE), Armand Peschard, observador internacional y asociado senior del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), en Washington, recalcó que el INE “al final del día lo único que hace es ejecutar y administrar lo que los partidos políticos en el Congreso han reglamentado.
“Creo que eso es importante mantener en mente dentro de un contexto de retórica en un México que se ha polarizado bastante”.
El especialista en ese tipo de proceso consideró que la consulta se convirtió en un instrumento de demagogia, con un costo económico alto, mientras Jean-Pierre Kingsley, ex jefe de la Oficina Electoral de Canadá, se dijo sorprendido por los ataques a los consejeros del INE.
También alertó que el ejercicio no fortaleció la democracia, por lo que una posible intención podría haber sido erosionar la confianza en el instituto para dar pie a una reforma en la materia.
En su documento de conclusiones sobre la jornada, Proyecto Delian afirma que el ejercicio “ha introducido un elemento de confusión entre el electorado, lo que ha llevado a especular sobre los motivos de su organización”.
Agrega que mientras el ejercicio fue para el partido en el gobierno un fortalecimiento de la democracia, para la oposición sólo se pretendía impulsar al Presidente y al partido guinda de cara a los comicios de junio próximo.