En febrero de 2022, la economía mexicana se frenó con respecto a enero, derivado de la caída del sector industrial y del agropecuario, que no alcanzó a ser compensado por el ritmo ligeramente mayor en los servicios, revelaron cifras del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE).
Mientras que en su variación anual, la actividad productiva de México presentó un aumento real de 2.7 por ciento, en donde el sector primario cayó 2.4 por ciento; en tanto el secundario y terciario registraron avances de 2.5 y 2.8 por ciento.
De acuerdo con la evolución del IGAE, un indicador referencial del producto interno bruto (PIB) mensual, la economía de México se estancó en el segundo mes del año, tras haber reportado tres variaciones positivas consecutivas, al haber pasado de 0.4 por ciento en enero a cero por ciento en febrero.
En el reporte del IGAE que dio a conocer este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) se reportó la debilidad de la producción industrial, al caer 1.0 por ciento en febrero con respecto a enero, luego de cuatro registros de crecimiento, en un contexto de persistencia de los problemas de suministro global por la pandemia y comienzos del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
Mientras que el sector primario (agricultura y ganadería) retrocedió 3.8 por ciento mensual, su tercer descenso al hilo.
En tanto, el sector servicios continuó recuperándose al aumentar 0.6 por ciento mensual, y ligar cuatro meses con lectura positiva, por lo que no fue afectado por el pico de contagios por ómicron a principios del año.
Así, la actividad productiva mexicana está 3.1 por ciento debajo de su nivel que tenía antes de la pandemia.
La actividad económica se quedó sin cambio en febrero con respecto a enero, debajo del 0.2 por ciento anticipado por el nowcast del Indicador Oportuno de la Actividad Económica que reportó el Inegi, recordó Alfredo Coutiño, director de Moody’s Analytics; mientras resaltó que el sector servicios no fue afectado por el pico de las infecciones (por la pandemia) en febrero.
Con este reporte del IGAE, complementó Janneth Quiroz, subdirectora de análisis de Monex, la tendencia creciente del indicador hace una pausa.
“Al observar los cambios porcentuales anuales y mensuales del IGAE, se percibe que el efecto rebote, originado por una muy baja base de comparación de 2020, se agotó desde septiembre del año pasado. Ahora las variaciones son más acotadas”, precisó Quiroz.
Para Francisco Flores, director de economía nacional de Banorte, la actividad productiva nacional muestra resiliencia al inicio del año, aunque todavía con retos relevantes por superar hacia delante, debido a distorsiones de oferta por la pandemia y presiones de costos.
“La economía permanecerá al alza en el segundo trimestre de 2022, aunque a un ritmo más modesto que en el primero, aunque con una mayor recuperación de los servicios y algunos sectores manufactureros”, prevé Flores.