La ganancia neta que obtuvieron las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) en el primer trimestre de 2022 se desplomó 75 por ciento respecto al mismo periodo de 2021, revelan datos oficiales. Dicha caída se da en un contexto en el que el gobierno federal impuso un tope máximo a la comisión que pueden cobrar a los trabajadores por administrar sus recursos pensionarios.
Cifras de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) indican que entre enero y marzo pasados las 10 Afore que operan en el sistema consiguieron una ganancia de 827 millones de pesos, cuando en los mismos meses de un año antes sumaban beneficios por 3 mil 273 millones.
Lo anterior es resultado de que en enero de 2022 las Afore registraron una pérdida neta de 68 millones de pesos (lo que nunca antes había sucedido), mientras que para febrero consiguieron un número positivo de 240 millones y en marzo uno de 655 millones.
Las 10 Afore que operan en el mercado mexicano obtienen sus respectivos ingresos de la comisión de 0.57 por ciento anual que le cobran a los más de 70 millones de mexicanos por administrar sus más de 5 billones de pesos producto del ahorro pensionario. No obstante, a dichos ingresos por comisión deben descontar impuestos y diversos gastos de operación, de forma que el dinero restante es su ganancia neta.
Históricamente las Afore han obtenido buenos dividendos con esta manera de operar, pues al cobrar la comisión sobre el saldo acumulado del ahorro, poco importa que éstas entreguen plusvalías o minusvalías a los trabajadores. Así, por ejemplo, en todo 2021 obtuvieron una ganancia de 14 mil 600 millones de pesos.
La pérdida para las Afore se da justo en el primer trimestre en el que se hizo efectivo el tope a la comisión anual que pueden cobrar a los trabajadores, la cual quedó en 0.57 por ciento para 2022, cuando en 2021 se ubicaba en 0.80 por ciento, lo que significa que de un año a otro fueron obligadas a descender 0.23 puntos porcentuales.
Dicha disminución provocó inconformidad entre las administradoras, pues argumentaron que sería un impacto en sus ingresos que se vería reflejado en una menor competencia.