La consulta en la que cerca de 2 mil trabajadores de la empresa Panasonic Automotive Systems, ubicada en Reynosa, Tamaulipas, elegirán a su nueva representación sindical, transcurrió durante el primer día entre denuncias de “compra de votos, intimidación” a los obreros y hasta golpes que dejaron al menos dos heridos.
Señalaron lo anterior la asesora laboral Susana Prieto Terrazas y Rosario Moreno, secretaria general del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de Industrias y Servicios Movimiento 20/32 (Snitis), uno de los dos gremios interesados en representar a los obreros.
También participa en la contienda el Sindicato Industrial Autónomo de Operarios en General de Maquiladoras de la República Mexicana (Siamarm), de Alberto Lara Bazaldúa, afiliado a la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
Prieto Terrazas, también diputada federal de Morena, aseguró que una hora después de iniciar las votaciones, un grupo de porros del sindicato cetemista llegó a las afueras de la planta ubicada en el Parque Industrial Reynosa, “para intimidar” a los obreros, a dos de los cuales “golpearon a tubazos y los amenazaron con un cuchillo”.
Se trató de alrededor de 200 personas ajenas a la planta Panasonic, que laboran en otras compañías y “acudieron con pancartas para inducir la votación”, indicó Rosario Moreno, secretaria general del Snitis. Los manifestantes portaban chalecos rotulados por la espalda con siglas del Siamarm, de acuerdo con los videos que compartieron a este diario.
La dirigente sindical, a quien en un principio se le negó el ingreso a la planta como observadora, denunció que en las instalaciones había delegados del Siamarm “comprando votos”, aunque por la tarde, dijo, la jornada se desarrolló “tranquila”.
“Compraron credenciales de elector de los trabajadores” acreditados en el padrón, “para que otras personas votaran en su lugar, a favor del sindicato de Lara”, explicó Prieto Terrazas.
Por su parte, Lara Bazaldua, acusó a la diputada federal de Morena de manipular con mentiras a los trabajadores sirviendo a intereses extranjeros.
“Me queda claro que ella es una máscara, es un títere de los sindicatos estadunidenses que quieren tener el control de las plantas en la frontera, pero es donde yo les digo: ¿si tanto quieren al trabajador por qué no empiezan por ofrecerles pagar cinco dólares la hora, eso sería un buen comienzo, no?”.
El proceso inició a las 10:00 horas y concluirá mañana a las 21 horas con el conteo de votos por parte de los trabajadores que decidirán de forma secreta a qué organismo sindical quieren pertenecer en los próximos dos años. La consulta está supervisada por el Centro Federal Laboral y por observadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
El sindicato que obtenga el apoyo mayoritario de los obreros recibirá la constancia de representatividad, documento indispensable para solicitar a la compañía la firma de un nuevo CCT.